Las diferencias de carácter entre los perros y los gatos constituyen todavía hoy el principal argumento que se esgrime cuando se quiere justificar el prehistórico antagonismo entre unos y otros.
¿Quién dijo rivales?
La afabilidad de los perros hace pensar que resulta más sencillo que un perro conviva con otro perro que con un gato, mucho más independiente. Pero esa eterna supuesta rivalidad se destruye con vídeos como el que hoy te presentamos, con miles de comentarios y visualizaciones desde que se publicó hace unos meses.
Nada menos que un perro de raza Pastor Alemán y un minino juegan e interaccionan durante largo rato sin que ni uno ni otro den la más mínima muestra de agresividad real.
Con una buena sociabilización, ambos animales pueden convivir perfectamente e incluso llegar a ser excelentes compañeros.