La vida cotidiana en un refugio está marcada por tristes destinos: mascotas simplemente abandonadas, que nadie quiere tener ya, animales enfermos o viejos que nadie quiere adoptar y que, por tanto, tienen que pasar sus últimos años en el refugio.
Por eso es más especial todavía cuando hay buenas noticias, y en el caso de la gata Elsa, son absolutamente positivas, como informa el conmovido personal del refugio de animales de Colonia-Dellbrück, en el oeste de Alemania.
17 años después...
Hace 17 años, vivía en el refugio un gatito para el que el personal veía pocas esperanzas. La gatita de 5 años estaba enferma: tenía una fuerte diarrea y había que alimentarla con comida especial todo el tiempo.
No es un panorama prometedor cuando se trata de encontrar una familia.
Pero la suerte se puso del lado de Elsa cuando una madre llegó al refugio con su hijo de dos años y se enamoró inmediatamente de ella. Adoptaron a la tímida gatita y le dieron un hogar para siempre.
En una carta, la familia de Elsa agradeció ahora al refugio por su fiel compañera, que lleva 17 años a su lado, enriqueciendo sus vidas.
Aunque hoy Elsa es menos activa debido a su edad, sigue estando en buena salud.
Definitivamente, historias como ésta son la prueba de que los prejuicios contra los gatos viejos o enfermos no tienen cabida en la adopción y que incluso las adopciones que se ven más complicadas pueden ser el inicio de una bella y feliz historia de amor.
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