1. Tu decoración es muy gatuna
Cuando alguien llega a tu casa a tomar café, lo primero que ve es… sí, un inmenso árbol para gatos en el salón. Aunque es cierto que hay algunos muy bonitos y estilosos, la verdad es que este mueble no suele entrar en nuestros planes de decoración.
Para que al gato le guste, el mueblecito debe estar además en la sala de estar y cerca de una ventana. Imposible disimularlo, así que olvídate de tener un salón de revista.
2. El michi bebe agua de los vasos
Tiene su bebedero, por supuesto, y quizá una fuente de agua para gatos siempre fresca… pero el minino prefiere tu vaso. ¿Por qué? Quizá porque es tuyo.

3. Los mimos son cuando él quiere
¡Faltaría más! Y ni se te ocurra rascarle cuando no tiene ganas, porque te vas a llevar un buen mordisco. ¿La razón? Es un gato y chimpún, cuando no le apetecen mimos, no hay nada que podamos hacer para convencerlos.
4. Cancelas un plan con amigos para no dejarlo solo
Confiésalo: a ti también te ha dado pena alguna vez arreglarte e irte de parranda sabiendo que tu bigotudo se va a quedar solito en casa.
O al menos, seguro que te has ido temprano de algún lado "porque el gato no ha comido", porque "no sé si le he puesto pienso" o incluso porque "no sé si le he dejado la puerta abierta".
5. Se adueña de todo el espacio en tu cama
¿Duermes en un rinconcito de 30 cm aunque tienes una cama matrimonial? ¿Te despiertas con tortícolis porque el gato se durmió junto a tu cabeza? Es de lo más común. Los gatos son los reyes y ese es el precio a pagar por que te deje compartir la cama con él.
6. Eliges el color de tu ropa de cama y de tu ropa en general en función del color de tu gato
No se trata de ir a la moda, sino de que los pelos del bigotudo de la casa no se noten tanto.
7. Se sienta cómodamente… en la mesa del comedor
No, no es para él ni te gusta necesariamente que se suba, pero… ¿Quién puede detenerlo? Los gatos necesitan trepar y si en el comedor no hay una repisa que le acomode, es probable que trate de adueñarse de la mesa para observar desde ahí sus dominios.
¿De las siete, con cuáles te sientes más identificado/a? ¿Tú también eres esclavo/a de tu felino?
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