Nadie aplaude a los veterinarios, al menos nadie humano. El dibujo de varios perros y gatos asomados a las ventanas de sus casas para aplaudir a su veterinario, se ha hecho viral en la última semana. Y es que, pese a poner sus servicios a disposición del Gobierno de España en la cuarentena del coronavirus, son uno de los grandes olvidados en esta crisis.
Veterinarios, los olvidados en la cuarentena
Aunque en un primer momento el Gobierno no tuvo a este sector en cuenta, los propios veterinarios tendieron su mano para ayudar en el estado de alarma por el Covid-19. Al final el Gobierno acabó por considerar necesarios sus servicios por razones básicas:
- Compromiso para atender a los animales, tanto a perros, gatos (y demás domésticos) como a los de granja.
- Es necesario tener las vacunas de los perros al día, así como la desparasitación. Los perros siguen saliendo a la calle.
- El uso de sus equipos sanitarios.
Es lógico que las clínicas veterinarias continúen abiertas por estos motivos. Al cuidar la salud de los animales también se cuida la de sus humanos. Sin embargo, la paradoja reside en que el sector veterinario no está reconocido en España como sanitario, una queja que viene de lejos.
“Todavía no he escuchado que estamos cediendo nuestros equipos: ventiladores, ecógrafos, estaciones de anestesia, generadores de oxígeno... para paliar el déficit que existe de este tipo de equipos. Parece que les cueste decir la palabra VETERINARIO”, clama Gaspar Soler Aracil, uno de estos profesionales, en su perfil de Facebook.
Sin mascarillas ni guantes, así trabajan los veterinarios
Además, muchos veterinarios se están viendo sin acceso a mascarillas o guantes. Ha llegado un punto en que los proveedores no les pueden vender más porque este material ya solo va destinado al Ministerio de Sanidad.
“Si por contra te da miedo el virus y pretendes cerrar... no puedes/debes, te necesitan tus pacientes. Pero si pillas algo es porque no te has protegido lo suficiente y, por tanto, si enferma tu mujer, tus hijos, tus padres o suegros ha sido culpa tuya”, dice el veterinario Daniel De La Cerda.
“No quiero que nos regalen nada, porque nunca lo han hecho, pero de vez en cuando una consideración hacia un sector cada vez más castigado –continúa De La Cerda –. Reconozcan a los veterinarios como sanitarios. Nuestro sector se encarga de la prevención de enfermedades transmisibles o no al ser humano”.
Según el estudio realizado por la compañía CM Research, para ver cómo afecta esta crisis a los veterinarios, España es uno de los países que más están asesorando a sus clientes y que más medidas están tomando de precaución. “En España sienten más presión por parte de los dueños de mascotas para que brinden asesoramiento”.
Los veterinarios no cuentan con el apoyo necesario de las medidas tomadas por el Gobierno en esta crisis. Corren el riesgo de exponerse ellos mismos, e incluso a ti, perro ellos continúan ahí. No se les consideran sanitarios de nunca, pero siguen ahí. Y nadie aplaude a los veterinarios. Solo los perros y gatos.