Una grabación extremadamente tierna
Vamos por partes. Tenemos a un cordero bebé con pañales y a un hermoso gato (muy bien alimentado). Solo que el gato, por su paciencia, más bien parece un perro. Este es uno de tantos casos en los que hemos de agradecer a quien contempló estas imágenes que se pusiera a grabarlas.
Nada sabemos de ellos porque la cuenta de Youtube en la que está el vídeo solo tiene una filmación, esta. Pero sí que vemos que ambos animales están en un hogar y que la cabrita tiene muchas, muchas ganas de jugar... con el gato.
Un minino muy tranquilo
Lo lógico sería pensar en que el minino no iba a aguantar mucho la situación y pusiera espacio de por medio pero ¡nada de eso! Soporta estoicamente que el corderito le empuje, le ponga las patas encima y hasta le persiga por la casa.
Hay momentos en los que el gato parece hasta encantado de recibir las caricias de su amigo y, en otros, con el rabo tieso y en guardia, simplemente se deja hacer.