"¡Un perro os está persiguiendo!"
Nos situamos en octubre de 2019 en el municipio brasileño de Volta Redonda, situado en el estado de Río de Janeiro. La Policía Militar y Civil está llevando a cabo varias identificaciones de personas sospechosas de tráfico de drogas y otros delitos dentro del municipio.
En el marco de esta operación, las autoridades detienen a un joven llamado Fabio de Souza Cesário, al que introducen en un vehículo policial para ser identificado en comisaría junto con otras 22 personas. Solo debe acudir para regularizar sus papeles al tratarse de un hombre sin hogar. En principio no hay nada contra él.
Todo se desarrolla con normalidad hasta que un vehículo de la Policía Militar de escolta observa que el coche de la Guardia Municipal en el que es trasladado el detenido está siendo perseguido... ¡por un perro!
El valiente animal corre por la carretera detrás del vehículo durante más de un kilómetro. Tiene claro que debe perseguir ese coche porque en el interior está su dueño, Fabio, el detenido, un hombre sin hogar de 28 años. No piensa dejarle escapar por nada del mundo. Su vida entera, su humano favorito, está en el interior de ese coche, y eso es algo que no se puede dejar pasar.
¡Detengan el vehículo!
La Policía, consciente de que el perro puede poner en peligro la circulación y su propia integridad física, decide detener el coche. El perro les rodea consciente de que por fin ha conseguido su objetivo: ¡Ha interceptado el vehículo!
Los agentes abren las puertas intentando atrapar al animal, pero este no va a dejarse coger. Únicamente cuando abren el portón trasero y puede ver a su amado dueño es cuando decide entrar en el vehículo para reunirse con él.
El perro fue identificado con el nombre Chei Di Pulga y se ha convertido en todo un héroe en Brasil por este acto tan noble y valiente. La buena noticia es que tanto el animal como su dueño fueron liberados, toda vez que el hombre regularizó su documentación.
Casos asombrosos
