Estás tan tranquilo/a en el sofá y de repente aparece a tu lado tu querido michi mirándote fijamente. ¿Te ha pasado alguna vez? También están los que logran camuflarse perfectamente entre los muebles, en el suelo de casa o en cualquier otro rincón.
Si al sigilo habitual de los gatos, que parecen estar entrenados para asustarte, le añades su gran habilidad para esconderse y camuflarse, el susto está garantizado. A tal nivel lleva su adaptación a lo doméstico que han logrado ocultarse en sitios tan cotidianos de casa como insospechados. ¿Te atreves a jugar a "dónde está Wally el michi"?
1. Jamás me encontrarás aquí, humano...
2. El cojín peluche de gato
3. Ha sido el gato de la foto del papel higiénico...
4. Ojo que la toalla del lavabo te está mirando
5. ¿Un gato atigrado a juego con el suelo? ¡Que lo pisas!
6. Pasas la mopa por el parqué y... ¡uy, el gato!
7. Esos ojos claros... despistan
8. Pero... ¿No estábamos jugando a encontrar al gato? ¡Solo veo un perro!
9. El gato alfombra y viceversa
10. Fijo que tras la cortina no ven y evito que me bañen...
¿Has encontrado a todos los gatos? Sí, hay que confesar que unos eran más fáciles que otros, pero solo por el arte que poseen, merecía la pena compartir a estos diez profesionales. ¿Cuál ha sido tu favorito?