El casero que fue a revisar la vivienda que su inquilino había dejado, jamás pensó que se encontraría con tal escenario. No se trata de que el arrendatario dejara la casa echa una pena, se trata de a quiénes abandonó allí y cómo.
Ocurrió en Aube, Francia, hace unas semanas. Al entrar en la casa, 8 días después de que el inquilino se marchara, vio dos sombras: eran dos perros de caza con los huesos clavados en la piel y atados con cadenas 😢😡.
Los perros estaban solos y amarrados
Después de pasar ocho días solos y amarrados, los perros estaban en muy malas condiciones. El dueño de la vivienda, en cuanto vio el penoso estado de los animales, les dio de comer y beber a los perros, Hércules y Hera.

Una denuncia ante la justicia
Más tarde, el hombre llamó a la Fundación francesa 30 Million Friends para que los perros pudieran ser atendidos adecuadamente.
Una vez que los perros estaban a salvo, fue esta misma Fundación la que presentó una denuncia contra el antiguo dueño de los perros.
De aquello ya pasaron unos días y Hera ¡ya encontró familia! 😍😍😍. Solo falta que alguien se fije en Hércules y ambos por fin reciban todo el amor y el calor de un verdadero hogar.
Hera la bienheureuse 😍 Après l’enfer, voici la route du bonheur qui s’ouvre pour la belle Hera ❤️ chez Pascale et sa...
Posted by Refuge 30 Millions d’Amis de La Tuilerie - Officiel on Saturday, May 14, 2022