Este fue un momento sumamente tenso para todos los transeúntes que circulaban cerca de este edificio en la isla de Tenerife a finales de mayo de 2017.
Con miedo de que el perro pudiera caer o saltar, un grupo de jóvenes sostuvo una manta sobre la acera para capturarlo. El corazón de todos los testigos debió de detenerse cuando el perro cayó desde la ventana del segundo piso. Por fortuna, el animal "pudo contarlo".
La policía ambiental de Tenerife, declaró que el perro había sido hallado en condiciones deplorables por una activista animal del Parque Nacional Teide, quien lo llevó a su piso situado en La Laguna para poder cuidar de él y alimentarlo hasta que recobrara su salud.
Una vez en lugar seguro, el animal se dio cuenta de que estaba atrapado y empezó a ladrar con desesperación hasta que llamaron a la policía.
Un grupo de personas se congregó en la entrada del edificio para sostener la manta que terminaría salvándole la vida al asustado animal. Milagrosamente, el perro cayó justo en la manta desplegada.
Tras el rescate de los vecinos y transeúntes, la policía llevó al perro al veterinario, donde afirmaron que el perro ya se encontraba bajo control y que se recuperaría pronto. El dueño real del perro terminó siendo localizado por las autoridades.
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