El amor de una madre es incondicional. Pase lo que pase, hagamos lo que hagamos; están ahí para apoyarnos. Tampoco les importa lo diferentes que sean sus hijos, ya que su paciencia y dedicación no entiende de razas.
Estas afirmaciones son clave para entender la euforia de la mamá gata de esta noticia tan especial. La felina escuchó llorar a un cachorro y... ¡se apresuró a ayudarlo!
No era su propio hijo
A la gatita del vídeo, publicado en el canal de YouTube LundKids en el año 2014 y que suma más de 13 millones de visitas, le importó poco que el recién nacido no fuera suyo, ni siquiera de su misma especie.
Esta gata nos enseña el verdadero significado del instinto maternal. Cuando escuchó al cachorro llorando, de inmediato se levantó para cuidarlo como si fuera uno de sus gatitos.
Ante tal escena, sus dueños no dudaron en meter al perrito en la caja de la gata con sus otros cachorros. Allí el perrito se enrolló en una de las patas de la gatita y ambos se acurrucaron.