Seguro que además de la expresión se llevan como el perro y el gato, cuando hablamos de los mininos y otros animales, también piensas en Silvestre y Piolín, ese lindo gatito que se las veía y se las deseaba para comerse al pájaro con el que compartía cuidadora.
Y es que los pájaros son de los animales que más atraen a los gatos, o dicho de otro modo: son sus presas favoritas. Pero, como siempre recordamos en Wamiz, cada animal es un mundo, y esta historia lo demuestra con creces.
Pollitos se quedan sin mamá
Los felinos, a pesar de su reputación de ser independientes y reservados, demuestran en muchas ocasiones un comportamiento maternal sorprendente. Un ejemplo conmovedor de esta naturaleza maternal es la siguiente historia, compartida en redes sociales en 2014.
Este comportamiento no es único en el reino animal, pero es particularmente fascinante cuando se manifiesta en animales que comúnmente son percibidos como independientes o con instinto de caza.
Una mamá adoptante muy especial
En las imágenes, se puede ver a la gatita en una caja de plástico con al menos diez pollitos acurrucados junto a ella.
A pesar del piar de los polluelos, esta joven mamá adoptante encuentra la paz y la tranquilidad mientras cuida de los pequeños, y casi alcanza a quedarse dormida durante la grabación.
Y es que, aunque es necesario tomar siempre precauciones para tener un pájaro y un gato bajo el mismo techo, a veces los animales nos dan una auténtica lección de valores. ¡Un aplauso para esta felina!