Kelli llevaba pocos días en su nuevo hogar en Prince Rupert, en Columbia Británica, Canadá. Oyó varias veces los maullidos de un gatito, pero no lograba saber de dónde venía el sonido para encontrarlo. "
Busqué de arriba a abajo en la casa hasta que su llanto se volvió desesperado, así que salí a la calle y me di cuenta de que estaba debajo de la casa", cuenta Kelli.
Un rescate complicado
Cuando Kelli localizó de dónde provenían los maullidos, comenzó a cavar. Bajo los escalones, pudo ver una pequeña bola de pelo que yacía inmóvil y apenas con vida.
El minino estaba allí solo, sin su madre a la vista. "Cuando lo encontré, no sabía si estaba vivo. Comencé a sentir pánico cuando me di cuenta de que ya no maullaba. Así que lo llevé directamente al veterinario. Allí me dijeron que tenía menos de una semana de vida”.
"No pensaba tener un animal cuando me mudé a mi nueva casa, pero Oscar me eligió", cuenta Kelli feliz. Tuvo que aprender a cuidar al gatito desde cero. Al principio le alimentaba con una jeringa porque era demasiado pequeño para un biberón.
Poco a poco, y después de muchas noches sin dormir, Oscar logró recuperarse, a ponerse bello y fuerte.
Un gato sano y fuerte
El gato de raza tuxedo creció a pasos agigantados y su personalidad comenzó a relucir. "És supervaliente y le gusta actuar como el hombre de la casa. Pero cuando no hay nadie más, se comporta como mi bebé y se acurruca conmigo", relata Kelli. "Lo que más me gusta es cuando se estira para que le dé un abrazo cuando llego a casa del trabajo".
Cuando Oscar cumplió ocho meses, otro gatito rescatado de la zona estaba buscando una familia adoptiva. "Después de conocer a Isabelle, supe que sería la compañera perfecta para Oscar. Ella era muy tímida al principio, pero pronto se encariñó con nosotros."
Oscar tampoco tardó en aceptar a su hermana gatuna. "Les encanta jugar juntos y son buenos amigos. Ahora corretean por toda la casa como locos", dice Kelli.
Ya han pasado varios años desde que Oscar llegara a la vida de Kelli. "Nunca olvidaré el día en que lo encontré abandonado debajo de mi casa. Estoy tan feliz de haberlo escuchado pidiendo ayuda y encontrarlo justo a tiempo. Lo amo con locura".
Kelli sigue publicando en su cuenta de Instagram las últimas aventuras de este bigotudo (Isabelle, Izzy para los amigos, falleció en 2018).
Nos alegramos de que ambos hayan encontrado una cuidadora tan ideal. ¡Mira la familia al completo!