Aunque es importante tener en cuenta que cada perro es único y su comportamiento puede variar, los chihuahuas tienen la habilidad de cambiar rápidamente su comportamiento, pasando de la calma a un perro "endemoniado" en un abrir y cerrar de ojos.
Aquí no hay quien viva
Tal vez los protagonistas de esta historia (dos efusivos chihuahuas) no habían salido a pasear el día que su propietario los grabó hace 7 años en vídeo, puesto que estaban más alocados que nunca. ¡A saber!
Hasta el punto de no parar quietos un solo segundo y molestando a su hermano mayor, un pacífico, elegante y grandullón boyero de Berna.
A punto de perder la paciencia
Eso es exactamente lo que le ocurría al hermano mayor de esta divertida familia canina. Tras varios minutos soportando el comportamiento hiperactivo de los pequeños de la casa... ¡Se dio por vencido!
Pero... antes de tumbarse en el suelo con gesto resignado, el boyero estuvo un buen rato ladrando a los adorables chihuahuas con cara de ''me estoy cabreando'' para que se tranquilizasen, aunque de nada sirvió.
¡No te pierdas el gracioso momento!
¡No cabe duda que con algunos amigos de cuatro patas hay que tener mucha paciencia!
Si no, que se lo pregunten a este grandullón tan tierno y bonachón al que de nada le sirvió ladrar ni mirar de reojo a sus hermanitos. ¡Su cara lo dice todo!