En unos días es el día más romántico del año y las personas que tenemos gato estamos deseando ir corriendo a casa para pasar San Valentín con nuestro felino preferido.
Sin embargo, todos sabemos que esta fiesta tan especial no es plato de buen gusto para una gran cantidad de gente que no cree en el amor y que todo es un invento de los grandes almacenes.
Por suerte, no nos damos por vencidos y nos hemos dado a la ardua tarea de conquistar a nuestro gato para conseguir que nos quiera, a su manera, de una vez por todas.
Cómo conseguir que tu gato te quiera
1. Compréndelo y acepta su personalidad (por ruda y fuerte que sea)
Tu gato es como un/a ex, así que no te queda más remedio que aceptarlo tal y como es —con sus pocos defectos y sus numerosísimas virtudes— para hacer vuestra relación más estable y que el respeto impere por encima de todo.
2. Dale su espacio
Tu gato ama la libertad. No le cortes las alas. Su instinto depredador lo posiciona como un ser al que le encanta explorar nuevos territorios y curiosear todo lo que puede y más.
La prueba de que lo estás haciendo bien es dejar de perseguirlo cada vez que no lo veas o cuando sientes que se ha ido de tu lado. Aunque sea difícil de creer, ¡seguro que está en su árbol para gatos espiándote!
3. Dale su comida preferida, esa que guardas para las ocasiones especiales
San Valentín no es un día cualquiera, es la jornada en la cual debemos expresar nuestro amor con pequeños gestos. Celébralo con tu gato ofreciéndole para la cena una ración de esa comida húmeda que tanto le gusta. Sí, la misma que le sacaste para el banquete de Navidad. ¡La ocasión lo merece!
4. No le des una ración extra de mimos
De la misma manera que te invitamos a darle un capricho culinario a tu gato, subrayamos la importancia de no agobiarlo con caricias.
Para él, que sea 14 de febrero o 5 de julio, no es excusa para dejarse tocar demasiado. Un gato es un gato en San Valentín y siempre. Eso sí, si notas que se pone tontorrón y reclama más mimos de lo habitual… ¡Aprovecha!
5. Regálale un rascador XXL
¿Existe un regalo mejor para un gato? ¡No! Además, con esto evitarás que termine de destrozarte las cortinas y demás muebles de la casa. ¡Regalazo para él y para ti!
Y si ya te has dejado un dinero en la fiesta del amor, no dudes en hacer un rascador casero. Será una forma perfecta de reforzar vuestro vínculo y de ahorrarte algún que otro euro.