Sable: perro en adopción

Sable
🗓 Edad: 4 años y 6 meses
🐶 Raza: Pastor alemán
⚖️ Tamaño: Grande, 35kg
❤️ Carácter: muy cariñoso y juguetón, pero hay que saber manejarlo. Bien llevado es una pasada, un perro que no se te despega y con el que puedes hacer de todo.
🐾 Compatible con perros
🩺 Estado de salud: Positivo a leishmaniosis.
🏡 Situación actual: En casa de acogida.
? Provincia: Córdoba, pero puede viajar para adopción.

Mi historia
Llegó a nosotras el
26 de abril de 2021
Nos llegó, una difusión que decía algo como «se necesita ayuda para sacar a un cachorro de un lugar donde han apuñalado a varios perros». Inmediatamente nos pusieron en contacto con una compañera de la guardia civil para que nos contara exactamente qué había pasado y qué ayuda necesitaban.

Un ser, en la búsqueda enfermiza de hacer todo el daño posible a su familiar, se armó con un cuchillo y fue a buscar a los perros que este último tenía en una propiedad al aire libre. Que ya nos diréis que culpa tienen los pobres animales de las gilipolleces de los humanos… En fin. El caso es que su arrebato de locura terminó con un perro asesinado y otro con una puñalada en el cuello.

Fuimos a por el pequeño sin tener ni idea de lo que nos íbamos a encontrar. Tanto fue así que, al llegar, nos encontramos con que no había un superviviente, sino dos.
Dos criaturas que han tenido que enfrentarse a un infierno en el que ni pinchan ni cortan; que han sido utilizadas para hacer daño a un humano porque a otro, que tiene serrín donde debería haber un cerebro, le da exactamente igual matar por conseguir un objetivo absurdo. Da escalofríos solo de pensarlo…

Sable tenía heridas en diferentes zonas del cuerpo, un tajo en una pata que le cuesta mucho apoyar y, encima, enfermo de leishmaniosis y filariosis desde a saber cuándo. Ambos ingresaron en una residencia porque no teníamos sitio a donde llevarle.

Allí fue tratado de filaria y leishmania, dos enfermedades que le tenían consumido y de las que se recuperó bien en su día, pero ahora volvemos a verle muy mal.
Comenzó hace unos días con una cojera que no remite con antiinflamatorios y está dejando de comer. Come, pero muy poquito y según el día. Está perdiendo mucho peso y su pelo no luce como debería, con todo el esplendor que debiera caracterizar a un animal tan extremadamente bello. Está triste, apagado y nos da la sensación de que ahora mismo le duele hasta la vida…
Sospechamos que la leishmania ha vuelto a cebarse con él y necesitamos analizarle y ponerle en tratamiento lo antes posible. Esta semana vamos a bajarle al veterinario y si se tiene que quedar hospitalizado unos días así se hará, pero nos preocupa mucho el después.
Sergio tiene a Sable dentro de su casa para controlarle, para procurar que coma y ofrecerle cuidados más individuales, pero es que allí, en la residencia e incluso dentro de su casa, hay muchos animales. Sergio no puede con todo y no puede cuidar de un animal que necesita atención y visitas al vet regularmente. Y es que tampoco tenemos otro sitio al que llevarle. Nadie ha preguntando nunca por él y nadie ha podido ofrecerle un hueco en casa, aunque sea temporal.
¿Cómo soy?
Es un perro muy cariñoso, noble y bobalicón con las personas. Tiene carácter, pero una vez que confía en ti se deja guiar en todos los aspectos y sería capaz de seguirte al fin del mundo. Crea un vínculo muy fuerte con quien considera su guía, con quien es súper obediente, muy fiel y protector. Es un perro muy inteligente y predispuesto para el trabajo y cualquier actividad o aventura que se quiera compartir con él. Con otros perros se lleva bien, siempre y cuando no haya situaciones de estrés. Necesita trabajar los paseos con correa.
Tiene leishmania controlada.

Mi familia ideal
Sable es un perro muy fuerte, poderoso y seguro de sí mismo. Necesita personas con experiencia que sepan guiarle, le ofrezcan actividades, tiempo de calidad y trabajen con él algunos aspectos como el paseo con correa y las presentaciones con otros perros. Por lo demás es un perro tranquilo, paciente y noble.
Para él sería ideal un hogar en entorno rural o lo menos urbano posible, sin perros o con perros equilibrados y preferiblemente sin niños por su tamaño, fuerza y necesidad de trabajar, aunque no es incompatible ni agresivo en ningún aspecto.