Parece agotado, pero al hombre todavía le sale una sonrisa en su selfie. Al fondo de la imagen se aprecian dos perros. Su compañía hace que Sammy Wilkinson, de 29 años, asuma todas las dificultades y conduzca más de 320 kilómetros hasta la frontera entre Inglaterra y Escocia. Objetivo: salvarles la vida a estos perros prohibidos.
El american bully XL es la raza que será ilegal tener desde este mismo 2024 en Reino Unido, una controvertida medida que se conoce desde septiembre de 2023. Tras el aumento de trágicos incidentes en los que estos perros estaban involucrados, el Gobierno británico decidió prohibir la posesión y cría del american bully XL para finales de 2023.
200 libras por sacrificar a tu perro
En un primer momento esto no implicaría necesariamente el sacrificio o decomiso de todos los ejemplares existentes, sino que podrían requerirse medidas preventivas como el uso de bozal y correa en lugares públicos, lo cual tendría como resultado el fin de la raza mediante la neutralización o esterilización.
Sin embargo, eso cambió. El Gobierno ofrece 200 libras a los propietarios de estos perros que los sacrifiquen en una clínica veterinaria antes del 31 de enero, una compensación por los costes, según informa Animal's Health.
Para evitar la muerte de estos perros, Sammy Wilkinson y Lisa Lou Bel se unieron para trasladar de Inglaterra a Escocia a tantos american bully XL como sea posible. Gracias a una campaña de financiación colectiva, recaudaron casi 11.400 euros, lo que permitió a Wilkinson llevar hasta ahora a 30 perros a Escocia.
Sammy continúa tanto como puede
El pasado 31 de diciembre publicó en sus redes sociales: "Estoy completamente agotado y mi coche se está desmoronando, pero tú, Rishi Sunak (primer ministro del Reino Unido), no mates a estos perros; ahora hay una carrera hacia la frontera escocesa antes de medianoche".
Y la carrera a contrarreloj de Sammy aún no llega a su fin. Aunque ya recorrió más de 8.000 kilómetros, continuará su operación de reubicación de los perros mientras le queden energías y dinero.
Casos asombrosos
