La reactivación que adquiere el perro en otoño choca con la baja energía de los humanos en esta estación. Ellos tienen más ganas de juego y nosotros de estar en el sofá bajo la manta: de repente surgen problemas de comportamiento en el perro.
Hablamos con el educador canino Sergio Tallón para comprender cómo influye el otoño y saber qué hacer al respecto para evitar problemas.
¿Cuándo tiene más energía un perro?
Cuando las temeperaturas caen, es decir, en otoño. Durante esa estación del año los perros presentan un cambio de energía.
En España, las temperaturas bajan una media de 10 y 15 grados y eso influye en el perro. Incluso muchas veces conduce a problemas de comportamiento porque las personas no sabemos atender esas nuevas necesidades, según comenta Tallón de Senda Canina.
Y hace referencia a uno de los conflictos más frecuentes entre el perro y el amo: “Los paseos por la tarde se hacen más cortos porque el frío nos incomoda, hay menos luz, hay menos gente y preferimos llegar a casa antes. Pero cómo se comportan los perros en otoño es diferente. Comienza el buen tiempo para ellos y este nuevo clima invita al perro a estar más activo”.
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Mi perro tiene mucha energía en otoño, ¿qué puedo hacer?
Las palabras de Tallón dejan al descubierto un desequilibrio de energía entre perros y humanos en otoño que, en algunas ocasiones, ocasiona un problema.
Ahí es donde aparece el primer conflicto: el perro precisa desfogar esa energía y a las personas les cuesta más estar en el exterior.
“En esta época surgen más problemas de comportamiento porque se agravan ante el exceso de actividad o energía del perro. Es importante comprender qué está pasando y saber actuar al respecto”, señala Tallón.
La mayoría de la gente no percibe esto precisamente hasta que llega el problema. Venimos del verano que, pese al calor, a las personas les encanta estar en constante movimiento. Sin embargo, "esas altas temperaturas tienden a aplatanar a los perros, con un mayor desgaste físico por el que suelen estar en reposo en casa".
Mientras que en otoño a la mayoría de los perros les pasa lo contrario: mientras su propietario desea quedarse tranquilamente en el sofá, el perro quiere salir a correr o quiere jugar.
“Los perros ya no necesitan estar tan tranquilos sobrellevando el verano –continúa el educador canino–. Ese descenso de las temperaturas favorece a cómo se comporta el perro: se cansa menos, está mucho más cómodo y, por tanto, más activo”. ¿Qué se puede hacer para que la situación no genere problemas?
Consejos para cansar a un perro con mucha energía
- Adaptarse al cambio de horario del perro.
- Abandonar el ritmo del verano.
- Dedicar más tiempo al perro.
1. Adaptarse al cambio de horario del perro
Que anochezca antes, a las seis de la tarde, también interviene en todo este asunto por ese “el perro quiere salir y yo no”.
Aquí es vital realizar el cambio de horario y adaptarse poco a poco al ritmo del perro para adelantarse a los posibles problemas.
“La gente no reacciona hasta que ve al perro como una moto, que rompa algo o que tenga un comportamiento fuera de lo habitual”, asegura Tallón.
2. Abandonar el ritmo del verano
“El perro ahora tiene otras necesidades y debemos saber cubrirlas. Aunque sea más cómodo estar en casa tranquilito y sin pasar frío, el ritmo del verano hay que dejarlo atrás para atender estas nuevas necesidades del perro”, recalca el amigo de Senda Canina. Es decir, hay que olvidarse de esos paseos cortos de 10 minutos.
3. Dedicar más tiempo al perro
“Cualquier problema de comportamiento, los nervios, el estrés, emperora ante el exceso de actividad o energía del perro –asegura Tallón–. Por ello es fundamental dedicarle más tiempo o el mismo tiempo pero de mayor calidad. Dar paseos más largos, entrenar más, jugar durante más tiempo, recorrer espacios nuevos, proporcionar cosas para que mastique, trabajos de olfato más exigentes...”.
Todo ello ayudará a que el perro libere esa energía, esté más tranquilo en casa y no haya problemas de comportamiento.
El otoño se presenta como la época estrella para el perro, así que aprovecha para disfrutar de más tiempo juntos y de camino también harás algo más de actividad física junto a él. Suena divertido, ¿verdad?
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