Terrier inglés miniatura

El Terrier inglés miniatura es muy cariñoso y da muestras de cariño a su familia adoptiva.

Es muy juguetón y siempre, aunque ya sea mayor, dirá que sí a actividades lúdicas.

A pesar de irradiar vida y ser muy dinámico, puede adaptarse a una vida familiar tranquila.

¡Es un auténtico payaso! Puede servirse de su lado más adorable para salirse con la suya.

Conserva los genes de todo terrier, con un fuerte instinto de caza que le hará perseguir a pequeñas presas.

El Terrier de juguete inglés es muy reservado con desconocidos.

Es un perro de compañía muy unido a su dueño.

Si al Terrier inglés miniatura cachorro se le ha acostumbrado a quedarse solo a través de métodos positivos y progresivos, podrá tolerar las ausencias de sus amos.

No es difícil de educar, pero no por ello debe obviarse enseñarle órdenes básicas.

Puede servirse de su ladrido para avisar de la llegada de un desconocido. Existen técnicas para hacer que un perro ladre menos.

No es muy aventurero, prefiere permanecer junto a los suyos para protegerlos.

Es un perro tranquilo que rara vez hará travesuras.

Las chucherías para perros serán de gran ayuda para premiarlo y motivarlo.

Es muy buen perro de alarma, pero como guardián es poco intimidante.

El Terrier inglés miniatura puede vivir tanto en la ciudad como en el campo.

Es un pequeño atleta, debe desfogarse todos los días para ser feliz.

Gracias a su tamaño reducido puede hacer los viajes junto a sus propietarios,, aunque deberá haber sido socializado desde joven.

No tienen por qué surgir problemas durante su convivencia con pequeños felinos. 

Debe haber sido socializado lo suficiente desde joven para relacionarse con precaución con los perros de mayor tamaño. 

Podrá interactuar con niños que sean cuidadosos y sepan tratarlo con delicadeza.

Puede ser adoptado por personas mayores dinámicas y activas.

Es perfecto para ser la primera mascota de un dueño inexperto que lo trate por lo que es: un perro y no un juguete.