“Ahora, mi gato ya no se ahoga cuando camina con la correa”.
© DenisNata
¿Cuál es el mejor arnés para gatos?
Elegir un arnés para pasear a tu gato no es tarea fácil. Si consigues sobrevivir al genio de tu felino, has de hacerte con el arnés que mejor se adapte a su morfología. Para ello, hemos hecho una selección de los mejores modelos de arnés: en A, en H, tipo chaqueta, etc.
Si vives en un piso y te apetece pasear a tu gato de vez en cuando para que estire las piernas y haga un poco de deporte, el arnés se convierte en un artículo indispensable.
De esta manera, tu gato podrá disfrutar del aire fresco y del exterior sin miedo a que se te escape si se asusta con el claxon de un coche o con los gritos de los niños.
También resulta muy útil para mantener a tu felino seguro y bien atado en el coche. Así, en un largo trayecto podrás soltarlo para que ande un poco mientras sostienes la correa.
En este sentido, lo ideal es que busques un kit arnés con correa ajustable a juego. Ten en cuenta que, al contrario de lo que ocurre con los perros, los gatos están acostumbrados a pasearse con total libertad, y no les será fácil acostumbrarse a la correa, por lo que hay que empezar a hacerlo desde que son pequeños.
¿Has decidido ya adoptar un gato? Acoge desde el primer día a tu bola de pelo con todo lo necesario para salir de casa a perseguir pequeñas presas. Para ello, échale un vistazo a nuestra guía de compra. ¿Vamos?
Índice
¿Cómo puedo sacar a mi gato a pasear sin morir en el intento?
Al igual que ocurre con los perros, si tu animal tiene tendencia a estirar de la correa, abrocharla a un collar no es muy buena idea, ya que puede hacerle daño en el cuello a tu gato e incluso causarle problemas respiratorios serios.
En estos casos, lo más indicado es completar el uso de la correa con el de un arnés, que permite tener un mayor control de tu animal y proporciona más seguridad y comodidad.
A la hora de elegir el arnés de tu bola de pelo, tienes que tener en cuenta varios criterios:
- Opta por un modelo acolchado para garantizar su comodidad.
- Busca un arnés en forma de V, H o de 8. El primer tipo ofrece un gran confort y te permitirá tener un control absoluto sobre el cuerpo de tu gato. Los modelos en H suelen contar con dos puntos de fijación para que la presión de la correa no la soporte solo la zona del cuello a la hora de pasear. Por su parte, el arnés en forma de 8 es el modelo más común, y está diseñado con dos círculos que rodean el cuello y el torso del animal.
- Tamaño del animal. Si el arnés es demasiado pequeño, a tu minino le costará respirar. Si es demasiado grande, se deshará del arnés con las patitas en menos que canta un gallo. ¡Buenos son los gatos! Lo ideal es hacerte con un modelo ajustable para no tener que ir comprando más a medida que crezca tu gato.
- El material también es un criterio muy importante. El nailon se adapta muy bien a los gatos que tienen la zarpa un poco larga, ya que es un material muy resistente y que, además, se puede meter en la lavadora sin problema. El arnés de algodón, por su parte, es muy ligero y está especialmente indicado para gatos con epidermis sensible. Por último, el cuero, aparte de moderno y estético, ofrece una gran gama de colores. ¡Ellos también tienen que presumir!
- La calidad del arnés y su sistema de cierre. Comprueba que las costuras son resistentes. Esto evitará que el animal intente deshacerse del arnés para escaparse.
¿Cuál es el mejor arnés para un Maine Coon?
Los maine coon son una de las razas de gatos más grandes que existe, de corpulencia robusta y musculada. ¡Pueden medir hasta 100 cm! A estos gatos tan cariñosos les encanta pasear con su familia.
Si tienes uno, has de buscar bien un modelo de arnés adaptado a su gran tamaño.
Para un gato tan robusto como el Maine Coon, opta por un arnés grande en forma de V o de 8 y capaz de resistir la fuerte presión del animal.
El arnés en V te permitirá controlar a la perfección los movimientos de tu animal. Los arneses en forma de 8 también se adaptan muy bien a esta raza, ya que les resulta imposible desabrocharlos.
Piensa que a los maine coon les encanta pasear y el arnés será un accesorio que llevará con bastante frecuencia, por lo que es importante que se sienta muy a gusto cuando se lo ponga.
¿Cómo ponerle el arnés a un gato?
- Arnés en forma de ocho: pásale la cabeza por la abertura más pequeña. Luego, basta con abrochar el aro más grande alrededor del pecho del animal.
- Arnés con forma de H: basta con abrochar los cierres situados en la parte de la cabeza y en la zona del pecho. La correa se coloca en la parte de arriba del arnés.
- Arnés en forma de V: colócalo alrededor del vientre del animal y abróchalo en la zona de la espalda y el cuello.
¿Cómo acostumbrar a un gato a pasear con arnés?
Debes empezar a acostumbrar a tu gato a llevar el arnés desde pequeño. Hay que ir poco a poco: empieza por enseñarle el arnés para que lo huela y se dé cuenta de que es un objeto inerte sin ningún peligro.
Unos días después, colócale el arnés sin abrochárselo para que se vaya acostumbrando. Ve dándole snacks y premios para que asocie el arnés a algo positivo.
Ve aumentando cada día el tiempo que le pones el arnés hasta que pueda llevarlo abrochado sin problema. Sigue tranquilizándolo con caricias y hablándole con cariño.
Antes de salir, puedes probar a atar la correa al pie de una silla y salir unos minutos. Dale una recompensa cuando vuelvas. Así, ya estará acostumbrado a salir con arnés cuando llegue el gran día.
¿Arnés o collar?
El arnés permite proteger a tu gato cuando salgas de casa. Si vives en ciudad, es una forma muy segura de pasear con él sin miedo de que se escape y lo atropelle un vehículo.
Además, también es muy útil cuando viajes en coche, ya que puedes utilizarlo para atar correctamente a tu gato durante el trayecto.
Con respecto al collar, el arnés reduce al máximo el riesgo de ahogamiento, pues la fuerza que hace tu gato al estirar de la correa no se concentra en la zona del collar.
¿Dónde puedo comprar un arnés para gatos?
Los arneses para gatos los puedes encontrar en cualquier tienda especializada. Una vez allí, puedes pedirle consejo a cualquier especialista. Aprovecha para palpar las diferentes texturas y probarle los diferentes modelos a tu gato.
También puedes realizar la compra por Internet. Hoy en día, la red permite encontrar un abanico más amplio de productos. También te permite acceder a las opiniones de los clientes.
Lee bien las guías de compra y consulta las diferentes notas y opiniones que la gente deja para hacerte una idea de qué tienda ofrece la mejor relación calidad-precio.
