¿Quién se puede resistir al rey de la casa hecho un ovillo en su cesta?
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Las mejores cestas para gatos
La cesta es una de las compras esenciales que debes hacer para ofrecer el mejor confort a tu bigotudo compañero. Normalmente, se compra antes de que el animal llegue a su nuevo hogar. Aquí te dejamos los mejores modelos.
Las cestas para gatos no solo deben ser cómodas, también tienen que ofrecer estabilidad y ser fáciles de limpiar.
En primer lugar, has de hacerte con una cesta adaptada al tamaño de tu gatito para que se sienta en total seguridad.
De mimbre, de madera, de plástico… 🧺 ¡Será por materiales! Ten en cuenta también la decoración de tu hogar antes de quedarte con un diseño o material específico.
Por ejemplo, el mimbre es un material natural que queda muy bien con cualquier estilo de interior. Sin embargo, la madera pega más con ambientes más acogedores y rústicos.
¿Cuándo llega tu pequeñín a casa? Hazte ya con la cesta que más te guste y acoge a tu animal como un auténtico príncipe para que se sienta la mar de a gusto desde el primer día.
Para ello, échale un vistazo a nuestro comparador de productos y a nuestra guía de compra. ¿Preparad@? 😽
Índice
- ¿Para qué sirven las cestas para gatos?
- ¿Qué hay que tener en cuenta antes de comprar una cesta para gatos?
- ¿Cuál es el modelo ideal de cesta para mi gato?
- ¿Dónde colocar la cesta para gatos?
- ¿Cómo enseñar a un gato a utilizar la cesta?
- ¿Qué tamaño de cesta elegir?
- ¿Cómo se limpia y desinfecta una cesta para gatos?
¿Para qué sirven las cestas para gatos?
Las cestas para mascotas están pensadas para que el animal no se malacostumbre a dormir por obligación en sofás o en tu propia cama.
Como ya sabes, los gatos son muy suyos, y una vez los habitúas a algo es muy difícil convencerlos más tarde de lo contrario.
Además, los mininos necesitan y aprecian su propio espacio. Eso no quiere decir que de vez en cuando le des a tu animal unos cuantos mimos en tu cama durante la siesta o por las mañanas.
En este sentido, se suelen encontrar redondas u ovaladas, dos formas que facilitan que el animal se haga un ovillo cómodamente para dormir.
También puedes optar por diversos materiales, desde los más clásicos (mimbre) hasta de cartón, de materiales reciclados, de madera o de tela.
En cuanto a su diseño, las hay abiertas y cerradas, muy prácticas para que el animal tenga su propia intimidad.
¿Qué hay que tener en cuenta antes de comprar una cesta para gatos?
Antes de hacerte con tu cesta, tienes que pensar bien en los gustos y los hábitos de tu felino y, por supuesto, en el diseño que más te guste para tu hogar.
¿Tu gato es muy sociable o prefiere ir a su bola todo el día? ¿En tu casa siempre hay ruido y movimiento o se trata de un lugar muy tranquilo?
En función de las respuestas, sabrás si lo que más te conviene es una cesta abierta o cerrada. También has de pensar dónde vas a colocarla.
¿Cuál es el modelo ideal de cesta para mi gato?
Uno de los criterios más importantes a la hora de elegir un modelo de cesta es el tamaño de tu gato. Si la cesta es muy pequeña, el animal no estará cómodo. Por el contrario, si es demasiado grande, no se sentirá seguro.
Por supuesto, busca un modelo que ofrezca el mayor confort, con un cojín suave y blandito, sobre todo para los gatos con cierta edad a los que les empiezan a doler las articulaciones.
Y, tercer criterio: ¡que sea fácil de lavar! Piensa que esto es esencial tanto para la higiene del animal como para que no pierdas mucho tiempo a la hora de lavarlo.
¿Dónde colocar la cesta para gatos?
Además de limpios y aseados, los gatos son animales a los que les gusta el equilibrio entre la compañía y la independencia. Te recomendamos:
- Que evites lugares solitarios (pasillo, trastero, sótano, galerías para la lavadora, etc.).
- Que descartes sitios cerrados (puerta) para que no asocien la estancia a un castigo.
- Que elijas una estancia concurrida, pero en la que el animal pueda tener su intimidad (zona separada del salón, al lado de la chimenea o estufa, etc.).
Otro plus es ubicar la cesta junto a un gran ventanal o ventana para que el animal pueda mirar el exterior cuando quiera. Le encantará ver los pájaros y la gente pasar.
Eso sí, cuidado con las corrientes de aire. Si puedes dejar la cesta cerca de un radiador, mejor que mejor.
¿Cómo enseñar a un gato a utilizar la cesta?
Antes de nada, acondiciona la cesta para que a tu felino le llame la atención: un cómodo cojín, una mantita, su peluche favorito… Así, enseguida entenderá que se trata de un lugar solo para él.
Si a pesar de ello se sigue mostrando reticente, siempre puedes poner un poco de hierba gatera o catnip sobre la manta de la cesta.
¿Qué tamaño de cesta elegir?
Como ya hemos señalado antes, todo depende del tamaño de tu gato.
Las dimensiones ideales para un gato de tamaño medio son 41 cm × 30 cm × 50 cm. De esta manera, el animal dispondrá de espacio suficiente para hacerse un ovillo o estirarse todo lo que quiera.
Por supuesto, ten en cuenta también otros criterios: altura de la cesta (para que puedan subir los gatitos o un gato con artrosis), el espacio del que dispongas, etc.
¿Cómo se limpia y desinfecta una cesta para gatos?
Recuerda que es muy importante que limpies la cesta de tu felino con regularidad. Como son animales tan limpios, para ellos es esencial que huela bien su cesta.
Cada semana, pasa la aspiradora por los cojines y por la cesta. Mételos, si lo permite el fabricante, en la lavadora. En caso de que la cesta sea de plástico, lávala con agua, jabón y vinagre blanco.
Y, por supuesto, no dudes en pulverizar la cesta y las cosas de tu gato con un buen producto antipulgas. ¡Y listo para ronronear toda la noche!
