Hace un tiempo, el cuidador de un perro de raza shih-tzu llevó al animal a la consulta veterinaria de Olivia Little-Stuart en Florida, Estados Unidos.
El cánido, de 11 años de edad, llevaba un tiempo arrastrando un problema de salud bastante grande.
Según contó la experta a sus compañeros de profesión en el grupo de Facebook I Love Veterinary Medicine, cuando vio por primera vez al perro pensó que se trataba de un macho con un testículo tamaño XXL.
¿Un testículo XXL?
La veterinaria aseguró que el caso era más complicado y sorprendente de lo que creía: el perro tenía un fibroma gigante.
Este tipo de tumores son de naturaleza cancerosa, pero en la mayoría de los casos son benignos.
Según el testimonio de la veterinaria, el fibroma debe extirparse lo antes posible. En esta ocasión, el propietario del animal había esperado demasiado tiempo en llevarlo al veterinario, de ahí el sorprendente tamaño del tumor.
La indignación de la veterinaria
Nada más examinar al perro, la veterinaria le aseguró al propietario que el animal necesitaba tratamiento urgente. Además, no tuvo reparos en mostrar su indignación con el cuidador del cánido.
A ella le pareció imposible que el perro llevase un tiempo con un fibroma gigante colgado de su cuerpo y que su propietario no se inquietase, sobre todo porque el tamaño del tumor le estaba haciendo la vida imposible al animal.
La imagen y la publicación del caso del shih-tzu no solo consternó a la veterinaria, también dejó sin palabras a los miembros del grupo de veterinarios. "¡Qué demonios es esto!", "Estoy a punto de vomitar", se puede leer en los comentarios del post, publicado en 2022.