Publicidad

¿Otro misterio felino resuelto?

¿Otro misterio felino resuelto?

 
© SJ Allen / Shutterstock

Científicos demuestran que los gatos pueden sonreír: ¿cómo es la sonrisa de un gato?

Por Luis Piqueras Ferriz Redactor | Traductor

Publicado el

La amistad con los gatos puede resultar difícil, ya que no siempre somos capaces de establecer con ellos el tipo de relación que nos gustaría. ¡Ahora hay una manera!
 

 

Según científicos de la Universidad de Sussex (Reino Unido), existe un método para hacer que a los gatos les gustemos y volverlos más dispuestos a entablar una amistad con nosotros.

Sonreír a un gato como lo hacen ellos, es decir, cerrando lentamente los párpados, sería la clave de la comunicación con tu felino.

El hecho de que los gatos respondan a este comportamiento no sorprenderá a los amantes de los gatos, pero esta es la primera vez que los científicos pueden demostrarlo en un estudio científico.

¿Los gatos sonríen?

Para evaluar si imitar el comportamiento de un gato cerrando los párpados lentamente puede mejorar o no la disposición del animal hacia nosotros, los investigadores llevaron a cabo varios experimentos, según Sciencealert.

Primer experimento

Al primer experimento asistieron los propietarios de 21 gatos de 14 hogares diferentes.

Su tarea consistía en sentarse a un metro de distancia de su felino y parpadear cuando el gato los miraba.

Las cámaras grabaron la expresión facial del dueño y del gato, y luego compararon cómo reaccionó el felino ante su humano cuando este no parpadeaba.

Los resultados mostraron que los gatos respondían guiñándoles también el ojo con más frecuencia a sus dueños en comparación a cuando los humanos no hacían ese gesto.

Por ello, los científicos creen que se trata de un mecanismo similar a nuestra sonrisa: sonreímos más a menudo cuando alguien nos sonríe. Hacemos esto en respuesta al mismo estímulo, por así decirlo.

La mirada lo dice todo. © Cibelly Roberta Mendes / Unsplash

Segundo experimento

En el segundo experimento participaron 24 gatos de 8 hogares diferentes. Esta vez, no fueron sus humanos los que intervinieron, sino un investigador que nunca antes había tratado con ellos.

En esta ocasión, la reacción se registró incluso cuando el investigador no parpadeaba. Además de cerrar los ojos mientras miraba al gato, el investigador también le tendió la mano.

Este estudio demostró que, en respuesta al parpadeo de un extraño, los gatos no solo estaban más dispuestos a guiñarles un ojo, sino también a acercarse a la mano con mayor frecuencia.

Las palabras de la directora del experimento

Karen McComb, quien dirigió la investigación, señalaba que se trataba del primer estudio de este tipo que confirma creencias y suposiciones comunes sobre nuestros bigotudos amigos.

"Es algo que puedes probar con tu gato en casa o con algún gato que te encuentres por la calle. Es una excelente manera de fortalecer el vínculo que tienes con tu mascota. Intenta entrecerrar los ojos como si estuvieras sonriendo y luego cierra los ojos durante unos segundos. Si el gato te responde de la misma manera, significa que habéis iniciado una conversación", añadía la experta.

Más sobre...

¿Qué le ha parecido la noticia?

¡Gracias por tu opinión!

¡Gracias por tu opinión!

Comentarios
Comentar
¿Quiere compartir este artículo?