Hay historias de perros maltratados que, aunque sean de la otra punta del mundo, atraviesan el corazón. Como la de Wesley, un perro que en sus primeros dos años de vida solo conoció el más terrible de los sufrimientos por parte de la mano del hombre.
Terrible sufrimiento
Wesley es un perro de montaña de los Pirineos al que encontraron deambulando por las calles de Austin, en Estados Unidos, en abril de 2024. La cuerda que llevaba al cuello estaba atada tan fuerte le creó un profundo corte.
Los tejidos de la piel de su cuello quedaron profundamente dañados, estaban en carne viva.
Aviso, las imágenes de la herida a continuación son duras de ver:
Fue el refugio americano Austin Animal Center quien rescató al perro y le quitó la cuerda del cuello. Después, Wesley fue transferido a Austin Pets Alive.
Necesita una buena familia
Austin Pets Alive pudo brindarle tratamiento a sus heridas y administrarle los medicamentos necesarios con las donaciones que aportaron sus seguidores: la factura ascendía a los 750 dólares.
"Su herida en el cuello se ha curado significativamente y también su corazón", cuenta Austin Pets Alive en su página de Facebook este pasado 16 de mayo. Tanto es así que anunció una buena nueva sobre su futura adopción...
Después de continuas visitas, abrazos y golosinas con queso, "Wesley floreció en el bichito que siempre supimos que era", señala la asociación. Esas visitas que le dan la vida son las de Alex.
"Constantemente viene en sus días libres para pasar el rato con Wesley y ayudarle a confiar en los humanos otra vez", explica uno de los voluntarios del refugio en los comentarios de la publicación.
Esta especie de casamentera de perros hizo posible que ahora Wesley tenga cola de posibles adoptantes y casas de acogida:
Ojalá estés pronto en un buen hogar ❤️.