Los animales, claramente abandonados, temblaban y observaban al ciclista con desconfianza.
Aunque estaban asustados, el hombre entendió de inmediato que no podía dejarlos allí.
Reacción inmediata
El ciclista llamó de inmediato a la RSPCA (la organización británica para la protección de los animales) en Staffordshire para alertar de lo sucedido.
Cuando llegaron, los rescatistas encontraron a cuatro perritas de raza Cockapoo empapadas y con el pelo completamente enredado y cubierto de serrín.
Todo indicaba que habían pasado la noche a la intemperie, atadas sin posibilidad de resguardarse.
La escena impactó tanto a los equipos de rescate que varios de ellos no pudieron evitar emocionarse.
Estado y cuidados
Una de las perritas estaba tan asustada que ni siquiera podía caminar con la correa.
Una rescatista decidió cargarla hasta el vehículo, y durante todo el trayecto, la perra no apartó la vista de ella ni un segundo.
Ya en el coche, se negó a separarse de la mujer que la había salvado.
Llamamiento a testigos
La RSPCA ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para recopilar cualquier información que ayude a esclarecer el caso.
Además de investigar lo ocurrido, su objetivo es encontrarles a las perritas un nuevo hogar donde puedan empezar de cero, lejos del abandono.