La historia de Fany parte de un lugar donde nunca debió estar: una fábrica en un polígono de Valladolid donde los trabajadores tenían prohibido alimentarla.
Hambrienta, sola y sin saber cómo sobrevivir, esta gata de apenas 18 meses dependía de la buena voluntad de quien se atreviera a romper las normas para ofrecerle algo de comida o cariño.
De una fábrica hostil a una nueva vida por empezar
Cuando el equipo de 113 Motivos Animales supo de su situación, no dudó: había que sacarla de allí. , tal y como cuentan en el apartado de adopciones de Wamiz España.
Ahora Fany está a salvo, esterilizada, vacunada, desparasitada y con chip. Todavía muestra algo de miedo, pero es una gata buena y dulce, deseando encontrar su lugar en el mundo.
Una oportunidad para cambiarle la vida
Fany necesita una familia o una casa de acogida que le dé tiempo, paciencia y mucho amor. Es joven, cariñosa y, sobre todo, merece descubrir lo que es sentirse segura.
"Fany es buenísima, solo necesita un hogar donde la comprendan y la cuiden", señalan desde la asociación.
Si tú también crees que todos los animales merecen una vida digna y llena de cariño, esta puede ser tu oportunidad para marcar la diferencia.
Suerte Fany ❤️.