Los activistas por los derechos de los animales de la Vorsitzende der Tatzenhilfe de Kassel (Alemania) se han enfrentado a todo tipo de situaciones a lo largo de su vida, pero hubo una en especial que los dejó pálidos. Concretamente, un informe que señalaba que había un gato, un tanto raro, vagando por el jardín de un vecino de Niederkaufungen.
Un hombre que vive en el estado de Hessen, en el centro de Alemania, dio la voz de alarma cuando encontró un gato en su hogar. Sin dudarlo, llamó al centro de bienestar animal de su localidad y varias personas acudieron a su casa a comprobar qué había exactamente en ella.
Cuando los voluntarios llegaron, se quedaron sin palabras. Según señalaron los medios del país, el animal resultó ser un ''depredador muy nervioso''.
Siguiendo el testimonio de los voluntarios, el gato estaba muy nervioso y meterlo en un transportín no fue tarea fácil. Tras varios intentos, lo consiguieron y lo trasladaron al refugio de Niederkaufungen.
¿Es un gato de verdad?
Cuando el animal llegó a la asociación; el director, Daniel Klims, lo examinó y comprobó que no se trataba de un gato doméstico.
Tras examinarlo de nuevo, Klims y su equipo aseguraron que el animal era un bebé de gato montés europeo. Tenía aproximadamente unas nueve semanas de vida.
Los gatos monteses viven en bosques frondosos, tienen territorios de alrededor de 80 kilómetros de radio. Por lo tanto, la probabilidad de encontrar a la madre de la cría era prácticamente inexistente.
Los voluntarios del refugio alemán no tardaron en encontrarle refugio en la reserva natural de Turingia.