San Bernardo
Otros nombres : St. Bernardshund, Bernhardiner
El San Bernardo es un perro de montaña poderoso, robusto y dotado de una gran inteligencia. Tranquilo, cariñoso con los niños y leal, es un compañero de vida sin igual. Es protector y prudente con desconocidos, pero jamás agresivo. Sus aptitudes lo convierten en el perro de búsqueda y rescate por excelencia.
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Esperanza de vida |
El San Bernardo tiene una esperanza de vida de entre 8 y 10 años |
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Carácter |
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Tamaño |
Grande
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Talla adulto |
Perra
Entre 65 y 80 cm
Perro
Entre 70 y 90 cm
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Peso adulto |
Perra
Entre 50 y 75 kg
Perro
Entre 55 y 90 kg
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Color del pelaje
El pelaje es blanco con manchas grandes color rojo claro u oscuro (perros con manto). Este “manto” puede ser interrumpido o atigrado. Las manchas marrón amarillento son toleradas. Son deseables los tonos oscuros en la cabeza. Debe tener manchas blancas en pecho, pies, punta de la cola, hocico, estrella y nuca. Idealmente debe tener un collar blanco y máscara oscura. |
Marrón
Rojo
Blanco
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Tipo de pelaje
Existen dos variedades, de pelo corto y largo. El pelo corto es denso, liso, pegado al cuerpo y grueso, con subpelo abundante. El pelo largo es mediano, liso o con ligeras ondulaciones y subpelo abundante.
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Corto
Largo
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Color de ojos
Sus ojos son de color marrón oscuro. |
Marrón
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Precio de compra |
Un San Bernardo puede costar entre 700€ y 1000€ |
La reputación del San Bernardo como perro rescatista sigue siendo cierta de forma relativa, ya que actualmente se privilegian razas más ligeras para facilitar las operaciones en helicóptero.
Más detalles sobre la raza San Bernardo
Orígenes e historia de la raza San Bernardo
El San Bernardo, de origen suizo, desciende de los antiguos molosoides asiáticos, específicamente del Mastín tibetano. La raza, tal y como la conocemos ahora, fue seleccionada por los monjes cenobitas del hospicio del Gran San Bernardo, de donde proviene su nombre. Los monjes utilizaban a este perro como guardián y para labores de rescate en la montaña. Así, estos canes acompañaban a los viajeros y buscaban a aquellos que se perdían en la nieve. Popularmente se cree que estos perros llevan un barril con brandi en el cuello para reanimar a las personas rescatadas, sin embargo, este mito tiene su origen en la Historia del arte. Fue el pintor inglés Edwin Landseer quien en 1831 inmortalizó en su pintura Mastines alpinos reanimando a un viajero en apuros a este noble perro con un barril al cuello, probablemente como un elemento decorativo. Además, también ayudó a popularizar el nombre de San Bernardo, ya que antes se les conocía simplemente como Mastines alpinos. El más célebre de estos perros fue Barry el Grande, quien durante el siglo XIV rescató a 40 personas en espacio de 10 años. El primer club de la raza fue creado en Suiza en 1884.
Carácter de la raza San Bernardo
El San Bernardo es un perro apacible, protector y apegado a sus amos. Su fidelidad es tal que daría la vida por los suyos.
Juguetón por naturaleza, disfruta jugando con niños, o simplemente cuidándolos.
A pesar de su gran tamaño, sabe ser discreto y permanecer tranquilo en casa. La hiperactividad no es una de sus características.
Se trata de un perro muy inteligente que sabe analizar las situaciones y tomar decisiones rápidamente. Además se adapta con valentía a diferentes contextos, por lo cual es un excelente perro de rescate.
Su instinto depredador es prácticamente inexistente.
Sumamente protector con los suyos, el San Bernardo es desconfiado con las personas que no conoce. Sin embargo, en poco tiempo puede mostrarse amigable.
El Bernhardiner, como también se le conoce, es bastante equilibrado: sabe cuándo pedir atención y cuándo alejarse.
Comportamiento de la raza San Bernardo
Este perro no está hecho para quedarse solo durante horas, y no soporta la ausencia prolongada de sus amos.
El cachorro San Bernardo deberá ser educado desde su llegada al hogar para que aprenda los límites a respetar. Además habrá que enseñarle a permanecer quieto, a caminar con correa y a no salir corriendo, ya que un perro de 90 kg puede ser difícil de controlar si no está educado.
A veces puede ser testarudo, sin embargo, una educación a la vez estricta y respetuosa hará que coopere rápidamente. Por último, no está de más iniciar su socialización con perros y humanos lo antes posible.
Es un perro que ladra únicamente para alertar a sus amos o alejar a los desconocidos.
Guardián y apegado a los suyos, no es un perro que se aleje del hogar.
De cachorro puede ser un perro bastante destructor en el hogar, debido a su carácter testarudo y su necesidad de estimulación, especialmente si se le deja solo. No obstante es muy tranquilo llegado a la edad adulta.
Es un perro con un gran apetito, y sobre todo un glotón que sabe ganarse a sus amos para conseguir cualquier golosina.
A pesar de su naturaleza pacífica, el San Bernardo es un guardián muy territorial. Su tamaño y ladrido son lo suficientemente intimidantes para alejar cualquier amenaza.
Educación de un San Bernardo
El cachorro San Bernardo deberá ser educado desde su llegada al hogar para que aprenda los límites a respetar. Además habrá que enseñarle a permanecer quieto, a caminar con correa y a no salir corriendo, ya que un perro de 90 kg puede ser difícil de controlar si no está educado.
A veces puede ser testarudo, sin embargo, una educación a la vez estricta y respetuosa hará que coopere rápidamente. Por último, no está de más iniciar su socialización con perros y humanos lo antes posible.
Estilo de vida del San Bernardo
Tomando en consideración su tamaño, no se recomienda que esta mascota viva en apartamento. Además, sus ladridos pueden resultar molestos para los vecinos.
Lo ideal para él será vivir en una casa con jardín o en el campo, con el espacio suficiente para ejercitarse, sin olvidar sus paseos cotidianos para estimularlo física y mentalmente.
El San Bernardo no es muy deportista aunque necesita sus paseos diarios para sentirse en forma. Debido a su tamaño, su desarrollo puede ser complicado, por lo cual se desaconseja que haga ejercicios intensos antes de los 18 meses.
Este perro gigante adora pasar tiempo con los suyos y conocer nuevos lugares, sin embargo, su tamaño no facilita los viajes. Será necesario informarse antes de realizar cualquier trayecto en transporte público, tren o avión. Si viaja en automóvil, este deberá tener el espacio suficiente para él.
Compatibilidad racial San Bernardo
El San Bernardo podrá tolerar la presencia de gatos si se le acostumbra desde cachorro.
Es un perro amigable con los de su especie, sobre todo si ha socializado desde cachorro. Se recomienda vigilar que no se porte de manera brusca con los perros más pequeños para evitar malas experiencias.
El San Bernardo es considerado como el niñero ideal, ya ques dócil, protector y cariñoso. No obstante, la convivencia entre la mascota y los peques siempre debe ser supervisada por un adulto.
El tamaño y la fuerza de estos perros son incompatibles con personas mayores o de salud frágil.
Este perro de montaña es un buen candidato para una primera adopción, a condición de que sus amos le dediquen el tiempo suficiente y respeten su necesidad de ejercicio.
No se recomienda su adopción a personas permisivas y con poca disciplina, ya que los malos hábitos de esta mascota pueden ser difíciles de controlar.
Precio aproximado de un San Bernardo
El precio de un San Bernardo varía en función de sus orígenes, edad y sexo. Un ejemplar con pedigree LOE ronda los 700€, mientras que en criaderos reconocidos pueden costar fácilmente entre 900€ y 1000€.
Para su manutención hay que tomar en cuenta su tamaño. El presupuesto mensual para comida y cuidados puede pasar fácilmente los 50€.
Pérdida de pelo del San Bernardo
Regular
La caída de pelo del San Bernardo es moderada, pero se acentúa durante los dos períodos anuales de muda (primavera y otoño). Durante esas semanas se recomienda optar por un cepillado diario para eliminar el pelo muerto.
Aseo del San Bernardo
Los cuidados de este perro de montaña no son complicados, sin embargo, las sesiones de cepillado pueden durar bastante tiempo.
Es recomendable además revisar sus ojos de tanto en tanto, ya que puede tener un lagrimeo excesivo que le provoque un entropión o inversión de los párpados.
Salud del San Bernardo
Su esperanza de vida está estimada en 9 años.
A pesar de su constitución robusta, el San Bernardo es propenso a cierto tipo de enfermedades, especialmente durante su desarrollo.
Debido a su abundante pelaje no tolera las temperaturas muy altas. En verano se recomienda dejar siempre a su disposición agua fresca, y sacarlo a pasear de preferencia por la mañana o por la noche.
El pelaje doble de este perro le da una excelente protección contra el frío. Al ser un perro de montaña, no es de sorprender que pueda realizar labores de rescate en condiciones invernales difíciles.
Glotón y poco deportista, este perro puede engordar fácilmente si se le da más comida de la que necesita.
- Síndrome de dilatación y torsión del estómago
- Displasia de cadera y codo
- Síndrome de Wobbler (malformación en las vértebras cervicales)
- Osteosarcoma (cáncer de huesos)
- Entropión (inversión de los párpados)
- Epilepsia
- Eczema
- Problemas cardíacos
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