11 años son más de 90.000 horas, más de 4.015 días. Todo ese tiempo compartieron Robbie Williams y su querido perro Spencer: viajes, camerinos, siestas, paseos, comidas y toda clase de aventuras.
Cruzó el arcoíris
11 años que se pararon en 2015, cuando el labradoodle de Robbie Williams cruzó el arcoíris y dejó al cantante británico con el corazón roto en la tierra.
"Triste noticia, chicos. Hoy hemos perdido a Spencer. Estamos desconsolados y conmocionados. Te queremos y te extrañamos muchísimo, Spencer".
Esas eran las palabras de Robbie Williams en septiembre de 2015 en Twitter, un mensaje que todavía hoy sigue sumando visitas y que cala en su público.
El labradoodle tenía su propia cuenta de Twitter con miles de seguidores. A través de las redes sociales de ambos se percibía lo bonachón que era el perro, así como la conexión con Williams que, sin duda, se desvivía por él.
Por la vida del cantante, que es muy perruno, han pasado muchos perros, y también gatos a los que adora como se aprecia en este vídeo:
"Es bueno ser yo, pero está genial ser un gato. Comparte tus gatos, me encantaría verlos", invitaba Robbie Williams a sus seguidores hace un tiempo.
Qué bonito que el homenaje a su querido Spencer, casi 10 años después de su muerte, siga circulando por las redes. Los animales dejan una huella imposible de borrar.