Una familia de Beverwijk (Países Bajos) perdió a su querida gata Angel en 2020 de forma misteriosa.
Según han deducido, durante un viaje a Dordrecht, a más de 100 kilómetros, lo más seguro es que la gata viajase con ellos a escondidas, posiblemente bajo el capó.
Al llegar a Dordrecht, el padre, Peter, vio "algo saltar de debajo del coche", pero no le dio importancia. Al volver a casa, Angel había desaparecido.
Años de búsqueda sin éxito
Tras su desaparición, la familia inició la búsqueda. Repartieron folletos, buscaron por la zona y esperaron un milagro. Pero con el paso de los años, la esperanza se desvaneció.
Un mensaje de WhatsApp inesperado
Pero hace tan solo unos días, ocurrió lo impensable: Eileen recibió el WhatsApp de un número desconocido: "Hola, ¿es usted la dueña de Angel?"
El mensaje incluía la foto de una gata, ahora de once años. Un hombre de Dordrecht la había visto merodeando por su casa varios días y decidió acudir a un centro donde le leyesen el microchip al animal.
El emotivo reencuentro
Al día siguiente, la familia viajó a Dordrecht. Al llegar, Angel los reconoció enseguida. "Cuando escuchó nuestras voces, vino corriendo hacia nosotros y nos frotó con la cabeza".
Se desconoce si Angel ha vivido en la calle todos estos años o si ha estado con alguna familia. Ahora, por fin, ha vuelto a casa.