A principios de agosto, Jennifer compartió un video insólito en TikTok. Mientras observaba a su gata junto a sus crías, notó que algo no encajaba en la camada.
Entre las diminutas bolas de pelo dormidas, se escondía un recién nacido que no era un gatito.
Al buscar delicadamente en la cesta, consiguió dar con el intruso.
Una sorpresa
Se trataba de un diminuto ratoncillo. Contra todo pronóstico, la gata no mostró ningún signo de agresividad. Al contrario, parecía dispuesta a aceptarlo entre sus propios bebés.
Riesgo de toxoplasmosis
Como recuerda el Cornell University College of Veterinary Medicine, los gatos pueden contraer este parásito al ingerir carne cruda o presas infectadas.
La mayoría de las veces, los felinos no presentan síntomas, pero en gatitos o felinos con una salud delicada, la infección puede causar fiebre, pérdida de apetito o gran fatiga.
Más susto que otra cosa
Afortunadamente, en un vídeo posterior, Jennifer precisó que su gata y sus cuatro gatitos se encontraban en perfecto estado de salud y no habían mostrado ningún signo preocupante de enfermedad.
El encuentro también hizo reír mucho a los usuarios, divertidos por la idea de que un bebé ratón pudiera haberse autoinvitado, como si nada, a convivir entre una camada de gatitos.