Pis Pás es una gata que apenas tiene un año de vida, pero una fortaleza y un corazón que impresionan incluso a los rescatistas más veteranos.
Fue encontrada al borde de la carretera por APA SOS Gredos (Navaluenga, Ávila), cansada, hambrienta y con esa mirada que solo tienen los animales que ya sufrieron demasiado en muy poco tiempo.
Adopción para Pis Pás
Pero su historia dio un giro inesperado: al llegar al refugio, no solo se convirtió en mamá de sus propios cachorritos… también adoptó a otros que no eran suyos.
Con un instinto precioso, decidió que merecían una oportunidad, y desde entonces los cuida con una dedicación que enternece a quien la ve.
Cinco pequeños, Pekin, Carla, Blaqui, Yuki y Bico, dependen de ella. Algunos no nacieron de su vientre, pero todos fueron protegidos bajo su cuerpo, acurrucados contra su pecho y educados con paciencia.

Una joven gata lista para empezar su propia vida
Pis Pás es una gata común europeo, con un carácter dulce, tranquilo y observador. Le encanta que la hablen suave, que la acompañen en sus ratitos de sol y que la acaricien despacito por la cabeza.
Está desparasitada y vacunada, y aunque aún no está esterilizada ni tiene chip todavía, la protectora puede asesorar a quien quiera adoptarla para completar estos cuidados.
¿Quieres ser su familia definitiva?
Pis Pás entregó todo su amor durante meses, protegiendo a cinco bebés que sin ella no lo habrían tenido tan fácil. Ahora es su turno.
Solo necesita un hogar donde por fin la quieran a ella. Donde pueda descansar, jugar y sentirse segura. Ojalá alguien la vea como lo que es: una gata joven que ha dado mucho… y que merece recibirlo de vuelta.