¿Se puede morir de amor? Si cerramos los ojos y escuchamos la canción de Miguel Bosé que habla de esa cuestión, podemos decantarnos por una respuesta afirmativa.
Pero no hace falta ir a nuestra cuenta de Spotify para saber que son muchas las ocasiones en las cuales los gatos y los perros nos dejan sin respiración y al borde del paro cardíaco.
El vídeo que puedes ver sobre estas líneas demuestra que el amor no entiende de razas. Y así lo demuestra una pareja de ciervos capaz de derretir hasta los corazones más gélidos a golpe de lametazo.
Se comen al gato
Según contó Terri Randell en su perfil de Facebook, un grupo de ciervos lo dejó sin palabras cuando comprobó las muestras de cariño que le estaban haciendo a un gato llamado Flambo.
Aunque no todo es una cuestión romántica. Para Terri, el felino se estaba dejando querer por pura pereza. ''Los ciervos estaban ayudándole a asearse mientras él se relajaba sobre la hierba'', se leía en los muchos comentarios de Facebook que aparecen en el post del vídeo.
Esta no era la primera vez que Terri veía a los ciervos tan de cerca, pero sí la primera que estos animales se acercaban a Flambo con el ''objetivo de adoptarlo''.