¿Cómo proteger las almohadillas de los perros? Los mejores productos
Las almohadillas de los perros, constantemente expuestas a la superficie, son vulnerables a las altas temperaturas y al estado del suelo. Proteger las almohadillas tanto en verano como en invierno es vital para su bienestar.
Garantizar el bienestar de tu perro implica prestar una atención particular a sus almohadillas. Constantemente expuestas a diferentes tipos de suelo y condiciones, son propensas a heridas, irritaciones y quemaduras.
Ya sea durante los calurosos días de verano o durante los gélidos paseos invernales, los distintos terrenos por los que pasa tu animal pueden afectar a la protección de las almohadillas de tu peludo compañero.
Por ello, aquí te traemos una selección de productos indispensables y unos cuantos consejos para cuidar correctamente las almohadillas de los perros. ¡Vamos allá!
Índice
¿Para qué sirven las almohadillas de los perros?
Las almohadillas de los perros desempeñan diversas funciones cruciales en la vida de estos animales. Algunas de ellas incluyen:
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Las almohadillas actúan como amortiguadores naturales al caminar, correr o saltar, proporcionando protección contra superficies ásperas, escombros y terrenos irregulares. Esta función contribuye a prevenir posibles lesiones y molestias.
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Posibilitan el equilibrio del perro en diversas superficies, ya sean lisas, resbaladizas o irregulares. Este agarre sólido contribuye a su equilibrio y previene posibles resbalones.
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Además, las almohadillas también contienen glándulas sudoríparas que ayudan al perro a liberar calor a través de la transpiración, contribuyendo así a mantener su temperatura corporal en niveles adecuados.
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Las almohadillas albergan una gran cantidad de terminaciones nerviosas que permiten al animal detectar texturas, temperaturas y sensaciones bajo sus patas. Esto facilita su capacidad de explorar el entorno y adaptarse a diversas superficies con mayor precisión.
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Las almohadillas son un medio de comunicación esencial para los perros. Algunos caninos utilizan sus almohadillas para marcar su territorio al dejar su olor en las superficies que pisan.
El cuidado adecuado de las almohadillas de tu perro, que incluye mantenerlas limpias, hidratadas y protegidas en condiciones extremas, es esencial para su bienestar y calidad de vida.
¿Cómo proteger las almohadillas de los perros?
Para proteger las almohadillas de los perros, puedes seguir los siguientes consejos:
- Comprueba regularmente las patas de tu perro para detectar cualquier herida (corte, quemadura, espiga clavada, etc.) o irritación.
- Evita sacar a pasear a tu perro en hora solar pico durante el verano o bajo muy bajas temperaturas en invierno. Sal a pasear cuando la temperatura es más moderada.
- Utiliza bálsamos hidratantes especialmente diseñados para perros para prevenir grietas en la piel y para mantener la elasticidad de la piel.
- Procura cortarle las uñas a tu perro con regularidad para evitar que terminen clavándose en las almohadillas.
- En días de lluvia, sécale las patas a tu perro para impedir que se acumule la humedad.
- Para días de gran actividad, aumenta la intensidad de forma progresiva para no dañar ni herir las almohadillas.
- Para superficies escarpadas o de difícil acceso (montaña, sierra, rocas en la playa), no dudes en hacerte con zapatos para perros.
Estos consejos te ayudarán a mantener las patas de tu perro sanas y cómodas, lo que le permitirá disfrutar plenamente de sus actividades y minimizar el riesgo de lesiones e incomodidad.
¿Cómo curar una herida en la almohadilla de mi perro?
Si la almohadilla de tu perro se ha dañado, aquí te mostramos cómo puedes brindarle primeros auxilios:
- Limpia suavemente el área dañada con agua tibia y una solución salina o antiséptica suave. Asegúrate de eliminar cualquier residuo o suciedad.
- Aplica un antiséptico que tu veterinario recomiende para prevenir infecciones.
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Usa un ungüento o bálsamo especial para almohadillas en perros para hidratar y calmar el área dañada. Si su perro trata de lamerse o masticarse la herida, colócale un collarín para que esta no empeore.
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Vigila cuidadosamente la zona afectada para asegurarte de que esté sanando correctamente y no presente señales de infección, como hinchazón, enrojecimiento, aumento de temperatura o secreción.
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Durante el tiempo que tarde en recuperarse tu mascota, limita sus actividades y evita superficies rugosas o extremas que puedan empeorar la lesión y dificultar la curación.
Es importante tener en cuenta que la gravedad de las lesiones en las almohadillas pueden variar. Si tienes dudas sobre cómo tratar la herida, no dudes en pedir cita en tu clínica veterinaria para asegurarle la mejor atención posible.
Si mi perro se hace daño en una almohadilla, ¿es necesario acudir al veterinario?
Si dispones en casa de los productos necesarios, como un buen antiséptico y una crema especial para almohadillas en perros, puedes tratar de curar pequeñas heridas o rasguños tú mismo.
En estos casos, solo un profesional puede realizar un diagnóstico correcto y prescribirte los antibióticos y el tratamiento más adecuados.
Además, el veterinario podrá darte instrucciones precisas sobre la mejor forma de limpiar, desinfectar y vendar la herida desde casa para favorecer la curación. ¡Lo más importante es la salud de tu perro!