El perro de la radiografía es un cachorro de tres meses de edad que llegó a consulta por problemas respiratorios. Lo evidente eran sus estornudos constantes y a la inversa, es decir, como si estornudara "para adentro".
En una primera exploración, el veterinario no encontraba la causa. El examen oral parecía normal y en las radiografías torácicas no había nada destacable. Así que decidió hacerle una radiografía lateral del cráneo.
Según relata I Love Veterinary en su muro de Facebook, ese último escáner dio con la clave: el cachorro se había tragado una piedra y estaba alojada en la nasofaringe, de ahí esos estornudos diferentes.
Throwback case from Sarah Yuki: "3 months lab puppy came in for acute onset of respiratory issues that sounded like...
Posted by I Love Veterinary Medicine on Tuesday, August 9, 2022
El peligro de que tu perro coma piedras
Por suerte para este cachorro, lograron dar con la causa y ponerle remedio. Ahora bien, hay muchos perros que se obsesionan con jugar con piedras, e incluso se las tragan, y son un verdadero peligro.
Las piedras pueden producir heridas y desgarros en el perro a su paso por la garganta y en el sistema digestivo. Si son piedras lisas, además, sus cantos facilitan que el perro se las trague como si nada.
Cuidado con jugar a lanzarle piedras a tu perro para que las atrape cual pelota, o que el perro tenga esta mala costumbre de llevarse piedras a la boca. Mejor prevenir que curar.
También te puede interesar: