Para muchos propietarios ir a la playa con su perro supone una experiencia estival súper divertida, pero también presenta muchos riesgos. ¿El principal? La ingesta de arena. O dicho de otra forma, el peligro de que un perro coma arena de la playa.
La arena puede llegar a ser muy peligrosa si los perros la ingieren. A pesar de que la mayoría de los casos de ingestión son accidentales, los propietarios de los canes deben tener en cuenta los riesgos que corre el animal si come arena. ¡Vigilar al perro es primordial para que un día de playa no termine en tragedia!
Mi perro comió arena de playa: ¿le va a pasar algo?
Los expertos británicos consultados para realizar este artículo subrayan que la ingesta de un poco de arena no es perjudicial para los perros. No obstante, si un perro pasa el día en la playa jugando a buscar sus juguetes, cavando agujeros y/o corriendo por la arena es muy probable que la cantidad de arena ingerida, de manera accidental, ponga su salud entre las cuerdas.
Causas de la intoxicación en perros por comer arena de playa
La ingesta de grandes cantidades de arena puede provocar daños en su sistema digestivo. Esto ocurre cuando la arena queda compacta en el interior impidiendo que la comida y el agua pasen por el intestino provocando dolorosos calambres estomacales. En este caso y siempre teniendo en cuenta las palabras de un veterinario, hablamos de obstrucción intestinal.
Síntomas de una obstrucción intestinal en perros
Los síntomas de esta enfermedad en perros son los siguientes:
- Falta de apetito.
- Letargo.
- Encías pálidas.
- Jadeo excesivo.
- Temblores.
- Deshidratación.
- Vómitos.
- Diarrea.
- Abdomen endurecido.
En la mayoría de los casos, los cánidos que sufren esta dolencia se recuperan rápidamente con la ayuda del veterinario, pero en los casos graves, la obstrucción intestinal provocada por la ingesta de arena puede ser mortal, sobre todo si no se trata a tiempo.
La clave, citando palabras veterinarias, es seguir las recomendaciones de los expertos antes, durante y después del problema, mantener una dieta sana, aportar agua fresca al perro (sobre todo en periodos de ola de calor) y vigilar el comportamiento del animal en todo momento.
¿Cómo actuar si un perro come arena de playa?
Lo más importante es llevar al animal al veterinario. Una vez en la consulta, el doctor será el encargado de examinar al perro y evaluar la gravedad de la situación. En algunos casos, el veterinario puede decir al dueño de la mascota que, simplemente; debe vigilarla y no será necesario prescribirte ningún tratamiento concreto.
También puede darse el caso de una actuación veterinaria de urgencia que consiste en provocar el vómito al animal y si el perro está deshidratado administrarle líquidos por vía intravenosa.
Solo los casos más graves necesitarán una intervención quirúrgica para eliminar la arena compacta que causa la obstrucción intestinal.
Remedios caseros para luchar contra la obstrucción intestinal
Si un cuidador cree que su perro ha ingerido arena de playa debe poner agua fresca a disposición de animal y vigilarlo muy de cerca. Ante el más mínimo cambio de actitud, es fundamental llevarlo al veterinario.
¿Cómo evitar que un perro coma arena en la playa?
Por desgracia, la mayoría de los casos de ingestión de arena son accidentales, por lo que puede ser difícil prevenirlos. Pero he aquí algunas cosas a las que hay que prestar atención:
- Evitar jugar con el perro en la playa
- Evitar que haga agujeros en la arena
- Evitar que beba agua del mar
- No pasar demasiado tiempo en la playa con el animal
- Si el dueño lo cree conveniente, puede ponerle un bozal.
- Consultar al veterinario en caso de duda.
1. No juegues con él en la playa
Al recoger los juguetes del suelo, el perro está ingiriendo arena sin darse cuenta. De hecho, la mayoría de los casos de ingesta de arena son el resultado de un juego en la playa.
En la medida de lo posible, los propietarios de los perros deben jugar con sus animales en una superficie de playa lisa en caso de lanzarle un frisbee o una pelota.
2. No le dejes cavar agujeros en la arena
Cavar en la arena es una actividad muy divertida para los perros, pero en realidad es muy peligrosa ya que es inevitable que el animal ingiera arena mientras se entretiene. ð Si ves a tu perro intentando cavar, intenta detenerlo distrayéndolo con otra cosa.
3. Evita que beba agua del mar
El agua del mar es peligrosa para los perros (y los humanos) por su alta salinidad. Pero además el agua del mar también contiene mucha arena.
Llevar agua fresca para mantener al perro hidratado evitará que tenga sed e ingiera agua del mar de forma compulsiva.
Evitar lanzar juguetes al agua para que el perro los busque es otra técnica muy útil en este caso.
4. No abuses de la playa
Cuanto más tiempo esté el perro en la playa, más arena entrará en su organismo. Los cuidadores deben ser razonables a la hora de llevar a los canes a los arenales.
5. Ponle un bozal a tu perro
Si el perro es un comedor compulsivo, ir a la playa será muy peligroso para él. En ese caso, los expertos recomiendan ponerle un bozal que le proteja de ingerir arena así como los desechos que lamentablemente la gente deja tirados en las playas (colillas, botellas rotas, restos de comida...)
6. Pide consejo al veterinario
Si un perro siente obsesión por comer arena y otras cosas inusuales, quizás sufra algún tipo de deficiencia nutricional. Consulta con el veterinario, él será el encargado de proporcionar la dieta perfecta para el perro.
Consejos para llevar al perro a la playa de manera segura
Si tienes en cuenta estos útiles consejos del veterinario, seguro que te lo pasarás en grande en la playa con tu perro sin correr riesgos.
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