Ambos perros son inseparables.
El pasado 3 de mayo, dos perros de raza dóberman, Prince y Duke, jugaban en el jardín de su casa mientras su familia los grababa en vídeo.
Fin del juego
Durante la divertida sesión de juego, los dos cánidos no paraban de saltar y correr, hasta que un empujón accidental de Prince provocó que Duke cayera a la piscina.
Según la descripción del vídeo publicado por la familia, "de todas formas, Duke necesitaba un baño".
Un susto
Joel, el cuidador de los perros, presenció la escena y acudió rápidamente a ayudar a Duke y a comprobar que se encontraba bien. Afortunadamente, lo animó a salir del agua sin mayores complicaciones.
Desde su publicación, el vídeo ha generado un animado debate en redes sociales. Algunos usuarios sugieren que se trató de un accidente, mientras que otros especulan que Prince pudo haber actuado de manera intencional.
Casos asombrosos
