La mujer de 31 años ha sido acusada de maltrato animal hacia un perro mestizo de maltés y shih tzu, llamado Rufy. Los hechos ocurrieron en septiembre de 2021.
La peluquera canina fue grabada por la cámara de vigilancia del local. La cuidadora del perro, al ir a recoger a su amigo de cuatro patas, se quedó profundamente impactada por el estado de Rufy.
Clienta impactada por el estado de su perro
En el vídeo se puede observar a la mujer golpeando repetidamente la cabeza del animal, levantándolo de la mesa, cogiéndolo por las orejas y lanzarlo a una jaula.
En aplicación de la Animal Cruelty Act australiana, la empleada ha sido condenada a una multa de 2 500 dólares y a 5000 dólares de costas judiciales. Actualmente, ya no trabaja en la empresa donde ocurrieron los hechos.
Una llamada para los propietarios
Para Kylie Green, inspectora de bienestar animal de la RSPCA de Australia Occidental, el incidente representa una violación de confianza extremadamente grave.
"Los propietarios de animales confían en que la persona a la que pagan para cuidar de su perro actuará de forma profesional y tratará a su animal con amabilidad y cuidado."
La RSPCA insta a todos los cuidadores a permanecer vigilantes y a denunciar cualquier actividad sospechosa para evitar que algo similar les ocurra a otros animales.