Fue el «Príncipe de las Tinieblas» y el «Padrino del Metal»: Ozzy Osbourne ha fallecido a la edad de 76 años.
Según informó su familia el pasado martes, se durmió plácidamente por la mañana "rodeado de su familia y de amor".
No se ha especificado la causa de la muerte, pero Osbourne llevaba años luchando contra las secuelas de su enfermedad de Parkinson y otros problemas de salud.
Solo unos días antes había ofrecido su concierto de despedida Back to the Beginning. Lo que nadie sospechaba entonces es que el concierto era el último.
Adiós a una leyenda
40 000 fans vivieron una noche mágica en Birmingham, donde todo comenzó hace 56 años: Ozzy, visiblemente debilitado por el Parkinson, cantó desde un trono construido especialmente para él.
"No sé qué decir. Llevo seis malditos años postrado. No os podéis imaginar cómo me siento", gritó a sus fans, palabras que hoy adquieren un significado desgarrador.
El Parkinson vence al icono del metal
La causa de la muerte aún no se ha revelado, pero Ozzy llevaba años lidiando con graves problemas de salud. La enfermedad de Parkinson había debilitado progresivamente al rockero, a lo que se sumaron complicaciones por lesiones de una grave caída en 2019.
Ozzy y Rocky: una amistad para toda la vida
Ozzy y su esposa Sharon eran conocidos por ser unos apasionados amantes de los perros; su hogar parecía un pequeño paraíso animal.
El más importante de los compañeros animales de Ozzy era Rocky, su pomerania. El peludo cuadrúpedo estuvo más de 15 años al lado de Ozzy, ya fuese de gira, en casa o en rehabilitación.
Cuando Rocky falleció en agosto de 2024, Ozzy se mostró profundamente afectado. En Instagram escribió: "Te veré al otro lado, amigo mío. Siempre te querré".
Sharon Osbourne definía al animal como el "compañero de fechorías" de Ozzy, y su hija Kelly derramó lágrimas tras su muerte: "No sé cómo será volver a casa y no verlo allí".
En un emotivo clip de 2017, se puede ver a Rocky haciendo headbanging al ritmo del éxito de Ozzy, Crazy Train,, una escena que conmovió a cientos de miles de fans.
Ozzy comentó entonces: "Mi mayor fan, mi perro Rocky".
Para muchos, la muerte de Ozzy Osbourne es el fin de una era; para otros, el comienzo de una leyenda. D.E.P.
