“Cuando salió que lo detuvieron por estafar miles de euros a costa de los animales, sentí un gran alivio”. Son las palabras de Cristina I., una de las personas que en su momento tuvo hasta tres juicios con Iván J., representante de la asociación Let’s Adopt España.
Fue el diario Las Provincias quien puso el martes, 15 de septiembre, el nombre de la organización en la parrilla informativa: “Detenido en Paterna el administrador de una ONG por estafar 700.000 euros de donativos para curar animales”.
Casos extremos de abandono animal
Según la investigación que comenzó en 2018, el acusado habría utilizado el Facebook de Let’s Adopt –en redes usa el seudónimo de Viktor Larkhill– para pedir donaciones con el objetivo de salvar a los perros y gatos gravemente lesionados que rescataba.
Tras conocerse la presunta estafa, muchos usuarios recordaron en Facebook el caso de Bianka. Es la perra que rescató Cristina en el año 2013 y por el que tuvo los juicios mencionados.
“Me encontré a la cachorrita destrozada, tirada en una caja en Madrid. La llevé al veterinario, donde vieron que la habían usado para sparring”, explica Cristina. “Yo no conocía a esa asociación para nada, referencias buenas ni malas”.
Como el caso estaba colgado en Facebook, “alguien se lo hizo llegar a Let’s Adopt”. “Cuando vieron el caso tan llamativo y que iba a sacar mucha pasta, enseguida se ofrecieron a ayudar”, asegura Cristina en declaraciones a Wamiz España.
El día de la primera operación de Bianka, “Iván apareció en la clínica. Ahí vi que los perros no le importaban en absoluto. Si vas a ver un perro en ese estado, al menos le dices algo, le acaricias. Él solo quería vídeos y fotos en dos idiomas”.
El primer roce vino por una llamada. Cristina quería saber cómo se encontraba la perra tras la cirugía. “La clínica veterinaria me dice que no me pueden dar información, que este señor ha dado esa orden. Le llamé y tuvimos una buena discusión”.
Aparte, ella informaba de todo el proceso de Bianka en Facebook para los interesados. “Me dijo que no contara nada de la operación de la perra porque entonces se paraban los donativos y solo llevaban 200 euros”.
“Él estuvo durante mucho tiempo difundiendo su caso. Asegura que renunció a ella y no es así, la perra no era suya –explica Cristina –. Cuando me di cuenta del panorama, le devolvimos los 900 euros que entregó en la clínica como fondo, no queríamos nada suyo”.
Después de varios enredos a través de Facebook, de conflictos en la propia clínica veterinaria, “nos denunció a mí, a Mati Cubillo, de Justicia Animal, y a un abogado que nos ayudó durante todo el caso de Bianka”. Y ganaron los tres juicios.
“No estoy detenido, estoy en mi casa”
Desde el pasado martes, Wamiz España ha intentado ponerse en contacto varias veces con Iván. Poco antes de publicar este texto (viernes, 18 de septiembre), el representante de Let’s Adopt mantenía una conversación telefónica con este medio.
“No voy a hacer declaraciones a ningún medio, todo esto está en proceso judicial”, recalcaba en tono serio. “Solo puedo decir que estamos bien, que seguimos como cada día trabajando por los animales y que nuestra labor continúa”.
Ante nuestra insistencia para conocer su versión sobre la presunta estafa de 700.000 euros, Iván remite al comunicado en vídeo que realizó el 16 de septiembre en Facebook (pincha aquí).
“No estoy detenido, estoy en mi casa haciendo una vida completamente normal”, dice al inicio del vídeo, que dura 13 minutos y cuenta con más de 1.400 reacciones.
En la grabación relata que la detención se produjo el pasado 28 de mayo y que no comprende la razón por la que ha saltado ahora la noticia. Además, asegura que en ningún momento han llevado a cabo ninguna actividad ilícita.
A mitad de su comunicado también hace referencia a los hospitales con los que suele trabajar, como es AniCura Valencia Sur Hospital Veterinario (hasta hace un año Hospital Veterinario Valencia Sur).
Wamiz ha hablado con este hospital veterinario y, por el momento, exponen su declaración institucional al respecto:
Investigación policial durante dos años
La Policía Nacional ha investigado durante dos años la actividad económica y fiscal en relación a las sociedades que administra el acusado. Al parecer, las cantidades de dinero declaradas por el detenido no correspondían con su alto nivel de vida que mantenía.
El presunto estafador contaba con la ayuda de su mujer y su hermano, supuestamente, para llevar a cabo esta actividad ilícita, según informaron fuentes jurídicas a Las Provincias.