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perra sobre una roca en medio del mar

La foto, que refleja la cruda realidad, ha dado la vuelta al mundo

© CEN / Kalogerikos Nikos

Un hombre se acerca a un perro varado en una roca y comprende inmediatamente lo que pasó

Por Águeda S. Lastra Periodista

Publicado el

Según se pudo leer en redes, la perra se refugiaba en una roca en medio del mar tras huir de las llamas. Pero, ¿qué hay de cierto en eso?

La foto que protagoniza esta noticia muestra a un perro acurrucado sobre una roca en el mar. De esa forma, el animal pudo salvarse del incendio que tuvo lugar en Mati (Grecia). La imagen se convirtió en un símbolo tras los devastadores incendios forestales de 2018 en la región griega de Ática, que redujeron a escombros la ciudad del distrito de Nea Makri. Al menos 82 personas murieron y más de 170 resultaron heridas durante el desastre.

El perro de la imagen consiguió salvar su vida a duras penas. Asustado por las llamas, el animal se lanzó al mar y nadó hasta la roca. Fue en ese momento cuando alguien le sacó la foto. 

Ha llovido mucho desde el incendio que propulsó la instantánea, pero el tiempo no ha dejado en el olvido una duda que surge alrededor de la misma: ¿su familia abandonó al perro presa del pánico o, de lo contrario; este se escapó mientras trataba de huir de las llamas?

La verdad tras esta foto

Tras su rescate, los activistas por los derechos de los animales y los amantes de los animales intentaron por todos los medios encontrar al propietario del perro. Una tarea que, a priori, no iba a resultar sencilla. 

Sucedió un milagro

La foto del perro se convirtió en el símbolo del desastre de Mati (millones de personas la vieron vía redes sociales). Gracias a ella, la familia del animal pudo volver a abrazarlo. 

Cuando los dueños del perro lo vieron en el feed de uno de sus perfiles sociales, se pusieron en contacto inmediatamente con los rescatadores. A ellos les dijeron que el perro era una hembra que respondía al nombre de Lua. 

"Es un milagro que siga viva, estábamos muy preocupados", aseguraron los propietarios del animal. 

La vida de esta perra, que por azar se ha convertido en el símbolo de una ciudad griega, no fue fácil. Nació en la calle y pasó mucho tiempo viviendo como callejera. Por suerte, dio con una familia que decidió adoptarla, pero durante el incendio de Mati consiguió, presa del pánico, romper el collar y la cadena y salir corriendo sin dejar rastro. 

Pero el destino le regaló una segunda oportunidad a ella y a sus cuidadores que pudieron volver a estar con ella. Son muchos los años que llevan viviendo juntos, felices y en paz tras la tensión vivida entre las llamas. 

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