La lucha contra las diferentes enfermedades de las mascotas ha tenido un gran avance con el uso de la ciencia y la tecnología.
Antes había que combatir a los parásitos con remedios que eran difíciles de emplear, requerían altas dosis de medicamentos para ser efectivos o podrían resultar tóxicos para los animales, el ser humano o el medio ambiente.
En la actualidad, la medicina veterinaria tiene como herramienta un sinnúmero de productos para todos los gustos: jabones, champús, lociones, talcos, collares, pastillas y, uno de los más recientes, las pipetas insecticidas.
A pesar de que no son tan recientes, muchas personas desconocen estos productos y las múltiples ventajas que tienen para las mascotas, los amos, los veterinarios y los tratamientos.
La medicina veterinaria y el mercado para mascotas han avanzado tanto que, en la actualidad, elementos o productos que eran usuales ahora quedaron obsoletos.
En la antigüedad, para dar un tratamiento antiparasitario, interno o externo, había que luchar con tu perro para poder darle un baño o que se comiera una pastilla o un jarabe.
Hoy en día, existen en el mercado de las mascotas productos innovadores: en formas y vías de aplicación, medicamentos, dosis, frecuencias, etc. Uno de los que más han revolucionado y cambiado las relaciones entre amos, mascotas y huéspedes indeseables (como pulgas y garrapatas) son las pipetas.
Historia y origen de las pipetas para perros
En la década de los 80, el tratamiento antiparasitario —tanto interno como externo, en las mascotas en general y, en especial en los perros, quienes eran los líderes del mercado— era diferente: existían pocos productos y los que se conseguían, incluso sin supervisión del médico veterinario, podrían resultar tóxicos para los animales y también para el medio ambiente debido a sus ingredientes.
Además, las vías de administración eran complicadas para los amos y sus perros: atomizadores, polvos, champús, jabones y collares resultaban todo un desafío para su administración en los canes y, adicionalmente, muchas veces el producto no resultaba eficaz para todos los parásitos, por lo que tocaba comprar y usar varios productos al mismo tiempo o de manera secuencial.
Posteriormente, en la década de los 90, el mercado de los antiparasitarios para perros se revolucionó con la llegada del Lufenurón, un principio activo altamente efectivo para el tratamiento contra pulgas y garrapatas.
A partir de allí, la carrera por el mercado llevó al descubrimiento, uso y combinación de diferentes principios activos como fipronil, imidacloprid, selamectina, entre otros.
Los antiparasitarios externos habían dejado de ser de uso exclusivo contra las pulgas y ahora mostraban gran eficacia contra las garrapatas y algunos parásitos internos.
Pero, sin lugar a dudas, uno de los mejores resultados de todo ese boom de la innovación fue el desarrollo de pipetas que facilitaban la administración de los productos en los perros y ofrecían ser eficaces a lo largo del tiempo, ofreciendo protección duradera.
Definitivamente, las pipetas llegaron para quedarse y cambiar los métodos de control de los parásitos en los perros.
¿Qué es una pipeta?
Conocidas también como “spot on” o “pour-on”, las pipetas son simplemente una forma de presentación de un medicamento antiparasitario. Lo realmente revolucionario es el mecanismo de acción. Estas pipetas contienen diferentes principios activos (medicamentos) que se absorben por vía tópica, es decir, a través de la piel de tu perro.
¿Cómo funcionan las pipetas para perros?
Anteriormente, para que tu perro aceptara una pastilla antiparasitaria o un jarabe, tenías que luchar minutos, horas o incluso días para que lo consumiera. Ahora, basta solo con seguir unos sencillos pasos y ya está.
Las pipetas contienen soluciones grasosas que sirven como vehículo para que el principio activo se distribuya de forma natural en la piel y el pelo de tu perro luego de 24 a 48 horas de la aplicación.
De esta forma, el producto puede llegar a las glándulas sebáceas de la piel (las encargadas de mantener la piel lubricada y protegida), en donde se almacena durante cierto tiempo y causa el control de los parásitos por contacto.
Algunos medicamentos diseñados también para parásitos internos sobrepasan la barrera de la piel y ejercen un efecto dentro de tu perro, tal y como sucedería en el caso de una pastilla o una solución oral.
¿Para qué sirven las pipetas para perros?
Las pipetas para perros tienen varios usos. Entre los más comunes, podemos encontrar:
- Contra pulgas: con principios activos como friponil, piriproxifen, metopreno, entre otros.
- Contra pulgas y garrapatas: con principios activos como spinosad, spinetoram, afoxolaner, fluralaner, entre otros.
- Contra mosquitos: para evitar enfermedades transmitidas por los mosquitos como las filarias o la leishmaniasis. Con productos como permetrina, neem o margosa, citronela, lavanda, entre otros.
- Contra parásitos internos y externos: con principios activos como selamectina, imidacloprid, moxidectina, entre otros.
- En la actualidad no solo se usan contra los parásitos, sino que también se ha comprobado su utilidad en otros frentes como el de propiciar calma y relajación. Con aceites esenciales de lavanda, valeriana, pino, entre otros.
¿Cómo se usa una pipeta para perros?
La forma de uso de una pipeta para perros es muy simple y similar entre unas y otras. La aplicación comprende 7 simples pasos:
- No bañar a tu perro dos días antes ni dos días después de la aplicación del producto. Recuerda que este mecanismo requiere de 24 a 48 horas para depositarse en la piel del animal y empezar a hacer efecto.
- Elegir cuidadosamente el tamaño de la pipeta de acuerdo con el peso de tu perro.
- Extraer la pipeta del envase y romper la punta en el lugar indicado.
- Para facilitar la administración del producto lo ideal es que tu perro esté de pie o acostado con la espalda visible.
- Aplicar la totalidad del producto presionando ligeramente la pipeta, preferiblemente en uno o dos puntos, en el espacio comprendido entre la cabeza y los hombros de tu perro. Es importante separar bien los pelos y aplicar el producto directamente sobre la piel del animal.
- Lava bien tus manos con agua y jabón luego de la aplicación. Adicionalmente, procura no acariciarlo en esa zona para evitar contacto con el principio activo.
- Desecha la pipeta de manera adecuada: no la viertas en aguas residuales y tampoco la mezcles con basura de uso doméstico, sino en recipientes diferentes.
¿Cuánto dura el efecto de una pipeta para perros?
La duración promedio del tratamiento con las pipetas al igual que su efectividad es relativa. Esta dependerá de varias condiciones como:
- El tipo de producto empleado
- La dosis administrada a tu perro
- El nivel de infestación de parásitos de tu perro o del entorno
- El control de las otras formas de vida de los parásitos (huevos, larvas, etc.)
- Qué tan bien seguiste las reglas de la aplicación del producto en el animal
Duración del tratamiento con pipetas
Normalmente, este tipo de tratamientos tienen una duración de entre 3 a 6 meses. Sin embargo, en el mercado se pueden encontrar productos que ofrecen una protección mensual, por lo que tendrás que repetir la aplicación con mayor frecuencia.
Existen casos en los que el control es tan efectivo, que tu perro no necesitará sino una aplicación cada año.
Las mejores pipetas para perros
Como lo mencionamos, en el mercado existen diferentes productos para cada necesidad. Es importante que antes de elegir una u otra pipeta, consultes con tu médico veterinario, él te indicará la mejor de acuerdo con el peso de tu perro y la necesidad de tu mascota.
Precauciones y recomendaciones generales al usar pipetas para perros
- Mantén siempre estos productos fuera del alcance de los niños y también de las mascotas.
- Almacénalos en lugares secos y a temperaturas inferiores a los 30 °C.
- Debes tener cuidado con zonas como los ojos, la boca, los oídos y la nariz de tu perro. Adicionalmente, la recomendación es no aplicar el contenido de la pipeta sobre lesiones de piel.
- Consulta con tu médico veterinario sobre la dosificación de acuerdo con la edad y el peso de tu perro. En adición, debes informar a tu médico veterinario sobre otros medicamentos que estés administrando a tu perro para evitar interacciones.
- No emplees las pipetas en perros gestantes o que estén lactando. En estos casos el médico veterinario te indicará las mejores opciones de tratamiento.
- Si bien cuando se siguen las indicaciones no existe riesgo de sobredosificación, es importante observar cualquier efecto adverso en el animal e informarlo prontamente al médico veterinario.
- No se recomiendan aplicaciones frecuentes (menos de uno o dos meses entre aplicaciones).
- No toques a tu perro luego de una o dos horas de aplicado el producto. Si lo haces, recuerda lavar bien tus manos, no ingerir alimentos o permitir el contacto con otras zonas del cuerpo como los ojos.
Precio de las pipetas para perros
El costo de estos productos dependerá principalmente de los componentes, el peso del perro y de las casas farmacéuticas que los producen.
Precio en Argentina:
- Aproximadamente, 1.800 a 3.500 pesos argentinos.
Precio en Chile:
- Aproximadamente, 25.000 a 50.000 pesos chilenos.
Precio en Colombia:
- Aproximadamente, 65.000 a 110.000 pesos colombianos.