El pobre cachorro llegó a la clínica veterinaria con una pierna rota y en muy mal estado.
Otra opinión
Como no podía ser de otra manera, Morgan Heather, auxiliar de la clínica, no estaba de acuerdo con el triste destino reservado para el pequeño, de tan solo 12 semanas de vida.
Finalmente, decidió incluirlo como miembro de su familia y se encargó de los trámites necesarios para adoptarlo.
Una vez que el perro se recuperó, Morgan lo llevó a su casa, donde lo llamaron Koe. Morgan compartió un vídeo del perro y escribió: "Se suponía que ni siquiera debía trabajar ese día. Amamos a nuestro Koe".
La familia de Morgan recibió al animal con los brazos abiertos. Y desde ese día, que casi se convierte en el último de Koe, el cachorro no ha recibido más que amor, besos y premios.
Su historia causa conmoción
Más de un millón de personas se han sentido conmovidas por la decisión de la enfermera y han querido compartir sus sentimientos en los comentarios:
Otra persona comentó: "Te encontró cuando más te necesitaba, eso es muy dulce". Y alguien más agregó: "El pobre cachorro tuvo que pasar por todo esto, pero encontró un hogar adecuado". Ahora, Koe es el "chico más feliz", tal y como se afirma en el vídeo.
¡Nos alegramos por él y por esta gran profesional!
