Una familia rota
La tragedia llamó a la puerta de esta familia de una forma súbita e inesperada en diciembre de 2019. Kris y Cori Clark, un matrimonio residente en Los Ángeles (Estados Unidos), quiso público su caso para concienciar al mundo de este peligro que muchas personas desconocen.
Y es que su vida cambió para siempre un fin de semana de diciembre en el que su perra, de nombre Isa, les dejó para siempre por culpa de un simple paquete de chicles.
Todo ocurrió extremadamente rápido: la perra, de seis años de edad, aprovechó un descuido de sus tutores para coger de la mesa un paquete de chicles, llegado a ingerir la mitad de ellos sin que nadie se diese cuenta.
Cuando la descubrieron, lo que parecía una 'travesura' sin importancia se convirtió en una tragedia inmediata cuando Kris y Cori comprobaron el envase y constataron la composición de los chicles: las gomas masticables contenían xilitol, sustancia potencialmente mortal en los perros que a menudo está presente en los chicles como sustituto del azúcar.
Consecuencias nefastas
La pareja reaccionó con suma rapidez y llevó a su perra al veterinario, pero poco pudieron hacer por ella.
Como es lógico, la pareja quedó devastada y por eso hicieron un llamamiento urgente a todos los propietarios de perros a través de Facebook con el objetivo de evitar que otras personas tengan que atravesar por el duro trago de no poder ni siquiera despedirse de su perro.