Al leer en la misma frase las palabras perro, conejo y pollo lo lógico sería imaginar al primero persiguiendo a los otros dos. Ya se sabe, aquello de la cadena alimenticia o el instinto de caza de los perros.
Nada más lejos de la realidad del vídeo que acompaña a este texto, el trío más insólito del mundo animal: un perro, un conejo y un pollito enamorados.
Un perro, un conejo y un pollito enamorados
Sí, sí, ¡enamorados! Las imágenes del vídeo protagonizadas por este par de tres no pueden ser más tiernas y sorprendentes.
Sobre el sofá están el perro, el que más espacio ocupa; acurrucado en él, entre su pata y su cabeza, el conejo; y el pollito, que lleva la voz cantante, se mueve a la vera de sus colegas y pía sin cesar.
El vídeo sobre estas líneas llega desde el otro lado del Atlántico, desde Río de Janeiro, gracias a la cuenta vegana de Instagram @nomeupratonaotembicho (en castellano sería, “en mi plato no tengo animales”).
Y los usuarios de la red social claramente se rinden ante el perro, el conejo y el pollito enamorados:
“¡No puedo con tanta ternuraaa!”; “Qué hermosa esta lección que Dios le da al humano”; “¡Justo el amigo que quiero!”; “La cara del perro es la mejor”; “¡Me los voy a traer a mi casa!”, son algunos de los comentarios aplaudiendo el comportamiento ejemplar de estos animales.
Esta cuenta brasileña se hizo eco de la fuente original, que es australiana. Se trata de la cuenta oficial de un pastor alemán llamado Marley. Él y sus amigos de cuatro y dos patas viven una feliz vida en Melbourne.
¡Esperemos que su amistad, siempre con supervisión humana, dure muchos años más!
Casos asombrosos
