Cuando Simone, cofundadora de la asociación Protect Animals Worldwide, recibió una llamada informando sobre un perro abandonado en un contenedor de basura, se esperó lo peor.
Al abrir la tapa del contenedor, se topó cara a cara con una joven pitbull acurrucada alrededor de sus cachorros recién nacidos.
Simone comprendió inmediatamente que el tiempo apremiaba. Los cachorros, helados e inmóviles, corrían el riesgo de no sobrevivir a la noche.
Inmediatamente, llevó de urgencia a la pequeña familia a la clínica de la asociación, donde el equipo se movilizó para estabilizarlos y que entrasen en calor.
Una mamá valiente
Gracias a sus cuidados, todos fueron recuperando fuerzas poco a poco.
Bautizada como Regina, la perra ha demostrado una ternura y una dedicación ejemplares. A pesar del miedo y el cansancio, nunca se alejó de sus bebés, cubriéndolos de atención.
El olor persistente a basura en su pelaje hacía adivinar que la pequeña familia había pasado varios días encerrada en el contenedor.
Pero gracias a su valentía y a la amabilidad de los voluntarios, los cachorros pudieron sobrevivir.
Unas semanas más tarde, todos los miembros de la camada fueron adoptados.
Regina, por su parte, todavía espera un hogar definitivo en Brasil, donde la asociación espera ofrecerle pronto la vida que se merece.
Rescates
