Valkova compartió la conmovedora historia a través de un álbum en Imgur titulado "La recuperación de Alfeiya", exponiendo la cruel situación que motivó su decisión de tomar cartas en el asunto y poner fin al sufrimiento del animal.
“Estaba en la escuela cuando la vi. Un grupo de niños le tiraba piedras, así que tuve que actuar rápido. Llamé a madre, a mi abuelo, a mi abuela; todos me dijeron que no podían hacer nada al respecto y que debía olvidarlo, pero no podía. Tenía una oportunidad de ayudar y eso hice”.
“Llamé a mi padre, con quien no hablo mucho, y me dijo que podría ayudarme en un par de horas. Me senté al lado de la cachorrita para esperar a que llegara y cuando lo hizo, me dio una manta para que la atrapara y llevarla al veterinario a pie, porque no la iba a dejar entrar en el coche".
“Cuando llegamos al veterinario, la limpiaron y le dieron antibióticos. Le diagnosticaron un tipo de sarna. Al día siguiente, mi madre fue a verla y pude convencerla de adoptarla con la ayuda de los doctores...."
“Pudimos llevarla a casa el 30 de diciembre de 2015. Le di un baño, pero ambas estábamos asustadas: ella del agua y yo de que me mordiera...
...Siempre le tuve miedo a los perros, pero no podía dejar a esta criatura sufriendo cuando podía ayudar. Espero que esta historia los inspire a ser mejores personas y ayudar a quienes lo necesiten”.
La perra vivió feliz en la casa de Anita hasta tal punto de parecer "otra". Esta es la última foto que publicó la joven de la perrita.