Giannangelo Liperi y Cristian Mallocci viven en una granja en Cerdeña. Entre los muchos animales que tienen, está su querida labrador hembra que dio a luz en octubre de 2020.
Cada nacimiento de un ser vivo tiene algo especial y único, pero este les dejó sin palabras. Resulta que uno de los cachorros de labrador a los que alumbró su perra nació de color verdoso. ¿Qué pudo haber ocurrido?
Un perro verde, ¿es posible?
A primera vista, la perra dio a luz a cinco cachorros sanos. Sin embargo, al cogerlos y observarlos de cerca se dieron cuenta de que uno de ellos tenía el pelaje verde. "¿Habrá dado la perra a luz sobre la hierba?", fue lo primero que pensaron los granjeros.
"Cuando lo tuvimos en las manos, vimos que era el color de su pelaje, era realmente verde. No entendíamos nada", aseguraron con asombro. Aun así, el perro estaba sano y... decidieron ponerle de nombre ¡Pistacho!
Giannangelo y Cristian indagaron más sobre el tema y descubrieron que ese color verde en el labrador es un fenómeno muy raro, pero completamente natural. Se produce por la biliverdina, una sustancia que está en la placenta, la orina y el jugo biliar del perro.
Durante el parto, la biliverdina puede mezclarse con el líquido amniótico de la madre y eso hace que uno o más cachorros tengan un color verdoso. Sabiendo esto, la expresión del refranero español de "eres más raro que un perro verde" cobra sentido.
Por llamativo que sea el color, esto es algo temporal. Con el tiempo el pequeño Pistacho tornó a su color canela como el resto de sus hermanos labradores. Eso sí, su nombre recordará siempre cómo nació.
Casos asombrosos
