Hay perros que detestan pasear bajo la lluvia, otros subirse al coche; también hay perros que el ruido de la calle no les gusta nada, por no hablar de los que temen ir al veterinario.
Por muy apañado que sea el personal del centro veterinario y por muy bien que lo traten, hay perros que con solo ver la clínica desde el coche… ¡Se ponen muy tensos! Ese es el drama que vive el pitbull del vídeo cuando le toca una revisión.
El perro se asusta al ver que está en el veterinario
Su cara en las imágenes es todo un poema. Al frenar el coche, gira la cabeza para mirar por la ventanilla y justo ahí se da cuenta: "No me han traído al parque, ¡toca veterinario!".
¡Casi se le desencajan los ojos al ser consciente de la situación!
El vídeo con la reacción del pitbull al visitar al veterinario cuenta con más de cuatro millones de visualizaciones. Y todavía hoy los comentarios de los espectadores se suceden sin cesar:
"Me mentiste, Susan. Me miraste directamente a la cara y me mentiste"; bromea uno de los usuarios poniéndole voz al perro.
"¡Se pregunta si esto es un castigo por comer de la basura! ‘No lo volveré a hacer, lo prometo’", dice otro. "Todos los dueños de perros reconocen esa mirada de miedo total".
Y eso… ¡Es así! Esperemos que no fuese nada y que la visita fuese a las mil maravillas.