A este perro le llamaban Gárgola porque su cuerpo se deformó al verse forzado a crecer encerrado en una jaula muy pequeña para él. Ahora tiene una segunda oportunidad y con ella, otro nombre: Landis.
Gracias al cielo, un buen samaritano se cruzó en su camino y lo salvó. Este joven pitbull fue rescatado por Second Chance Rescue NYC Dogs después de que los voluntarios de esta asociación recibieran una llamada de auxilio por parte de una perrera que había encontrado al inocente animal en una condiciones que ponían los pelos de punta.
La palabra “desgarrador” no es suficiente para explicar lo que le pasó a Landis. El grupo de rescate lo salvó a mediados de diciembre del 2014 y aún hoy citan este rescate en su página de Facebook puesto que lo que sufrió este lindo pitbull les ha marcado especialmente.
''Con todas las historias de horror que hemos visto y compartido a lo largo de los años, palabras como ‘deprimente’ comienzan a perder sentido. Es muy triste, no deberíamos tener que usar este tipo de palabras tan a menudo”, aseguran.
“No hay mejor palabra para describir a este amiguito que ‘Gárgola’, por quien recibimos una llamada de auxilio por parte de la perrera. Esta dulzura tenía entre 1 y 2 años; como pueden observar, sufría de una severa deformidad. Estaba desnutrido, sus piernas estaban dobladas por la mitad y su columna tenía una pronunciada curva. Al verlo, uno supondría que fue forzado a vivir y crecer en una jaula pequeña. ¿De donde vienen estos monstruos que caminan entre nosotros y son capaces de cometer estas atrocidades?”. Continúa el post de la asociación. ??
“Después del sentimiento de dolor, la siguiente respuesta fue odio. ¿Cómo puede alguien hacer esto? ¿Cómo una persona pudo dejar que esto pasara? Lo peor de todo es que el perro es una dulzura. Uno pensaría que estaría molesto y frustrado, pero no es así. Como la mayoría de los perros que hemos conocido, él solo quería dar y recibir amor”. “Lamentablemente no pudimos desaparecer el dolor que ha vivido, pero pudimos darle la atención médica que necesitaba y ayudarle a tener el mejor futuro posible”.
Landis pasó por un largo proceso de recuperación rodeado de amor y diversos cuidados. Visitó a un especialista ortopédico que notó una gran mejora en sus patas desde que fue rescatado y cree continuó mejorando con el paso del tiempo.
Desde el primer momento, el especialista recomendó no proceder con una cirugía porque sería muy dolorosa. Landis tuvo el coraje para recuperar la fuerza muscular de sus patas por sí solo. ¡Qué valiente! ¡Es todo un ejemplo de superación!
“Sus piernas nunca serán perfectas pero Landis está feliz y sin dolor, eso es lo más importante” declaró Second Chance Rescue NYC Dogs. Landis necesitaba un hogar donde no se vea obligado a caminar sobre concreto o superficies duras, un jardín con mucho césped suave… y encontró el lugar perfecto.
Landis fue adoptado y su nuevo hogar es el sitio ideal. Second Chance Rescue NYC Dogs informó “Él fue a Mass, cerca de Cabo Cod. Está a pocos minutos de la playa (la arena es genial para sus patas), la casa tiene un gran patio con cerca y hace sesiones de hidroterapia que le permiten estar mejor que nunca”, subrayan los voluntarios.
“Aprendí con el paso del tiempo a hacer mis necesidades de manera controlada y amo sentarme en las piernas de mi mamá para morder mis juguetes”. Firmado: el pitbull al que la vida le ha dado una segunda oportunidad. ¡Gracias!
Después de varios años con la que fue su nueva familia, Landis ha llegado a caminar con sus patas “derechas” y estas se fortalecen cada día más.
¡El antes y después de Landis no deja a nadie indiferente!
Por fortuna existen personas de buen corazón en el mundo que ayudan a salvar a perros como Landis de estos terribles abusos.