¿Qué es la epilepsia en gatos?
Definimos la epilepsia felina, como un trastorno en el cerebro que se caracteriza por un mal funcionamiento de las neuronas. Estas son más sensibles a las variaciones de la actividad eléctrica que hay en el cerebro.
Esta característica las hace ser hiperexcitables provocando que las alteraciones en la actividad eléctrica neuronal se produzcan crisis espontáneas e inesperadas de duraciones variables y que suelen estar representadas por convulsiones.
Estas crisis, afectan directamente al cerebro y al sistema nervioso además de producir un gran desgaste físico y cognitivo. Dependiendo del tipo de crisis y de su duración la recuperación va a ser más o menos complicada, pudiendo dejar secuelas en nuestro gato.
Tipos de epilepsia felina
- Epilepsia idiopática: caracterizada por tener crisis reiteradas y en ciertos casos, convulsivas. Estas crisis no tienen un origen específico ni una enfermedad subyacente detrás de las convulsiones. Este tipo de epilepsia suele afectar a mininos jóvenes de 4 años o menos.
- Epilepsia secundaria: en este caso, el gato sufre de crisis epilépticas que son originadas por una enfermedad subyacente o un tumor que produce los ataques. Este tipo de epilepsia suele afectar a mininos de 8 años o mayores, ya que cuando envejecen son más sensibles a padecer enfermedades.
- Epilepsia criptogénica: este tipo de epilepsia es una especie de mezcla entre la epilepsia idiopática y la epilepsia secundaria ya que no hay un origen aparente para las convulsiones pero se cree que hay una enfermedad tras ella a la cual no se le logra encontrar el origen.
Síntomas de la epilepsia en gatos
- Convulsiones reiteradas y espontáneas: contracciones involuntarias y violentas de uno o todos los músculos del cuerpo. Tras las convulsiones o durante las mismas puede haber pérdida de la consciencia.
- Alteraciones motoras y sobrecarga muscular generalizada.
- Afecciones de carácter neurológico que se manifiesta a través de la hipersalivación constante, la pérdida del equilibrio y otros síntomas.
- Dificultad para mantenerse en pie, caminar o poder comer sin necesidad de ayuda.
- Afecciones sensoriales relacionadas con posibles pérdidas de visión y posibles alucinaciones. Muchas veces se muestran con ataques de agresividad sin motivo, o maullidos constantes no controlados.
- Nerviosismo constante e hiperventilación.
Tratamientos para la epilepsia en gatos
Como para la mayoría de las enfermedades, la epilepsia en gatos tiene varios tratamientos con diferentes orígenes: podemos tratar la parte química del organismo, la parte muscular y la parte emocional y sensitiva del minino.
1. Medicamentos
Para la epilepsia en gatos, el tratamiento químico recetado más habitual es el fenobarbital o conocido más comúnmente como luminaletas. Estos actúan sobre el sistema nervioso central, deprimiéndolo para así facilitar la neurotransmisión inhibidora y evitar que se repitan las convulsiones.
2. Acupuntura
En la epilepsia en gatos, el tratamiento químico puede integrarse con medicina tradicional china buscando su origen desde otro punto de vista y atacando otros síntomas con acupuntura. Empleando los puntos específicos para las convulsiones y complementar con los puntos necesarios para equilibrar la parte interna, la acupuntura puede ayudar a disminuir las dosis de fenobarbital y ayudar a reducir la periodicidad de las convulsiones.
3. Rehabilitación
El desgaste físico que producen los ataques epilépticos es bastante grande. Por lo tanto, es necesario cuidar el cuerpo de nuestro minino. El tratamiento también debe incluir rehabilitación, ya que con ello lograremos aliviar las molestias físicas de nuestro gato y ayudarle a tener un mejor control de su cuerpo.
4. Controlar la iluminación y el ruido en casa
Por último para controlar la epilepsia en gatos, el tratamiento del hábitat es también muy importante ya que cualquier factor de estrés en la vida de tu minino puede desencadenar un ataque epiléptico. Controlar el tipo de luz que hay en casa, las entradas y salidas de personas o animales en casa o incluso las salidas al veterinario pueden ser cruciales para la salud de nuestro gato.
Recuerda que es muy importante que acudas al veterinario si notas algo extraño en tu compañero felino. Sobre todo, hacerlo si tiene una crisis y comienza a convulsionar.
La epilepsia en gatos necesita de un tratamiento y un control riguroso para estabilizarla y así evitar un deterioro excesivo en el organismo del minino.